“Me dijo que no tenía la cabeza puesta acá por unos temas personales“. Esa fue la declaración de Sebastián Battaglia para definir el presente de Jorman Campuzano, quien iba a ser titular el pasado viernes en lo que fue la derrota por 3 a 0 ante Banfield pero finalmente el entrenador optó por no contar con el colombiano desde el arranque debido a la presencia de una oferta por su pase.
Luego se conoció que esta propuesta era de parte de Lanús y que era una oferta por el 50% del pase del colombiano, algo que convenía en Boca debido a que la única posibilidad de liberar un cupo de extranjero con una negociación en el ámbito nacional es mediante un traspaso y no a través de una cesión.
Sin embargo, con la necesidad del Xeneize de sumar un volante mixto en su rotación, desde la Ribera le ofrecieron un trueque al Granate: el 50% del pase de Campuzano por el 50% del pase de Tomás Belmonte, el juvenil de Lanús que es uno de los mejores proyectos en esa posición en el fútbol argentino. Y si bien las partes avanzaban correctamente, este lunes el club del sur del Gran Buenos Aires impuso una nueva condición para incluir en la negociación.
En concreto, según lo trascendido por el periodista Luis Fregossi, la institución dirigida por Miguel Almirón habría pedido la inclusión de los préstamos de Aaron Molinas y Gabriel Aranda para concretar el trueque Campuzano-Belmonte, ya que el futbolista de Lanús tiene un valor de mercado superior (5.5 millones de dólares vs 3 millones según lo establecido por el portal Transfermarkt), además de que el Granate necesita reforzar el puesto de zaguero central y el de mediocampista creativo.
Desde Boca aún no respondieron por la contraoferta de Lanús, pero es sabido que Aaron Molinas pidió quedarse en el Xeneize cuando estuvo a punto de irse cedido a Defensa y Justicia, y con el Pola Aranda, si bien es el quinto central en consideración detrás de Rojo, Izquierdoz, Zambrano y Figal, Boca no tiene intenciones de prestarlo, sobre todo en este mercado donde Nicolás Figal se lesionó y tendrá para dos meses de recuperación, por lo que una cesión dejaría con menos margen de cambio al club de la Ribera. Así y todo, las negociaciones seguirán, ya que Lanús pretende algo más en el intercambio.