Guillermo Barros Schelotto confirmó que asistirá a la despedida de Juan Román Riquelme, uno de los grandes socios futbolísticos que ha tenido a lo largo de su carrera como jugador, por lo que se concretará su regreso a Boca tras la campaña que terminó con la dolorosa derrota ante River en la final de la Copa Libertadores de 2018 disputada en Madrid.
Ese desenlace le valió al Mellizo algunas críticas entre los hinchas y derivó en un sombrío cierre del vínculo como entrenador cuando en realidad su ciclo había sido exitoso, conquistando un bicampeonato de Primera División, pero fundamentalmente dotando al equipo de un estilo reconocible, de una identidad futbolística.
La carrera de Guillermo como entrenador continuó fuera del país, primero vinculándose a Los Angeles Galaxy y desde 2021 a la Selección de Paraguay. Por eso, el regreso a La Bombonera le servirá también de termómetro a quien sin dudas es un ídolo del club.
“Bien Guillermo, porque eran personajes antagónicos en la novela de Boca y ahora confirmó que va a estar. Guillermo quiere medirse con la gente de Boca. Desde Madrid no pisó nunca más La Bombonera. Para mí quiere ver, según como lo trate el hincha, si tiene plafón para volver a ser técnico de Boca“, opinó Toti Pasman en Radio La Red.
Ezequiel Sosa, periodista que sigue de cerca la actualidad del Xeneize, no tuvo ningún tipo de duda en relación a esa apreciación: “Guillermo va a ser uno de los más coreados de la cancha. De los cuatro costados, todos parados. Cuando Boca no tuvo técnico, el 90 por ciento de los hinchas pedía que fuera Guillermo Barros Schelotto“, pronosticó.