La historia de Lionel Messi con PSG ya es historia. Ahora que la Pulga se transformará en jugador de Inter Miami (solamente resta que firme el contrato), en el elenco francés están comenzando una nueva historia.

Tras la salida de Christophe Galtier, en el elenco capitalino comenzaron a buscar diferentes opciones, donde el máximo candidato era el alemán Julian Nagelsmann. Y a pesar de las reuniones, el ex Bayern Múnich rechazó la propuesta.

Ahora que ya no está Messi, y que también circulan diversos rumores de una posible salida de Neymar, en Francia quieren barajar y dar de nuevo. Y como si fuese poco, Kylian Mbappé se le plantó a la dirigencia y le manifestó que no renovará el contrato que finalizará dentro de un año. Por eso mismo, la renovación será total.

En este caso, para reemplazar a Galtier, desde la Comisión Directiva eligieron a Luis Enrique, el entrenador español que tuvo una histórica pelea con la Pulga cuando ambos coincidieron en FC Barcelona. Si bien subsanaron los problemas personales, la historia quedó en la retina de todos los fanáticos.

Aún faltan algunos detalles para que se concrete su arribo, según pudo informar L’Equipe, pero en Francia son optimistas con la chance de que el DT de la Selección de España en el Mundial de Qatar se sentará en el banco de suplentes para reencontrarse con Neymar. Y la salida de Messi le vino como anillo al dedo…

Messi recordó la pelea con Luis Enrique

Fue apenas inició el 2015 cuando la Pulga se cruzó con Luis Enrique. El mejor jugador del mundo regresaba de sus vacaciones en Argentina y, a la hora de enfrentar a Real Sociedad y así retomar la temporada, el DT lo sentó en el banco de suplentes.

“Yo volvía de Argentina después de unas vacaciones y jugábamos el 2 o 3 de enero, no me acuerdo bien. Bueno, terminé yendo al banco y tuvimos una discusión por eso. Nos duró un tiempito”, le explicó Messi a Movistar+. Pero no quedó allí, porque el DT también dio su versión.

En declaraciones a Catalunya Radio, Luis Enrique indicó que “hasta que se solucionó todo hubo un tiempo de tensión, que yo no busqué, sin ninguna duda, pero que apareció y que tuve que gestionar”.