Paul Pogba supo tener el mundo a sus pies. Estrella absoluta de la Selección de Francia, campeón del mundo, nominado cuatro veces al Balón de Oro y elegido como el mejor jugador Sub 20 del planeta. Pero, cuando parecía que alcanzaría su pico de rendimiento, el mediocampista francés entró en un torbellino de polémicas que provocaron que hoy en día no pueda jugar al fútbol profesional.
Con 31 años, el jugador que llegó a valer más de 100 millones de euros está suspendido por dopaje, enfrentado a varios de sus ex compañeros y ha incursionado en una nueva faceta actoral que se conocerá pronto en los cines.
Paul Pogba, de promesa a realidad
Pogba siempre estuvo en el centro de la escena. Ya en 2009, cuando abandonó Le Havre para unirse al Manchester United en un cambio de club que enardeció al club francés, que hasta protestó en FIFA, el joven mediocampista era señalado como un “jugador de época”.
Así, siempre era tenido en cuenta en las selecciones juveniles de su país con la que ganó la Copa Mundial sub 20 en 2013, certamen por el que ganó el premio a mejor jugador y luego recibió el Premio Golden Boy. Todo esto llevó a Juventus a fijarse en él.
En 2012, sorprendió al irse libre de Manchester United, club que por entonces era dirigido por Sir Alex Ferguson, quien no le había dado demasiado lugar en el primer equipo. El DT, no dudó en liquidarlo por su decisión: “Es decepcionante. Yo no creo que él haya mostrado respeto alguno, para ser honesto”.
En el conjunto italiano se afirmó como estrella y ganó 9 títulos, de los cuales 4 fueron de Serie A. Siendo figura en el mediocampo, llegaron además las distinciones individuales, como las nominaciones al Balón de Oro en 2014, 2015 y 2016, pese a que nunca logró quedar en la terna final.
Pogba, el joven de los 100 millones y el Mundial de Rusia
Ante semejante actuación en Juventus, el Manchester United se enfocó en recuperarlo para refundarse. Con esa misión, el cuadro inglés desembolsó 100 millones de euros en 2016 y convirtió a Pogba en el jugador más caro de la historia hasta ese momento, superando a Gareth Bale (Real Madrid), Cristiano Ronaldo (Real Madrid) y Gonzalo Higuaín (Juventus).
Al mismo tiempo, en la Selección de Francia se convertía en una pieza fundamental de una generación plagada de cracks, como Antoine Griezmann y Raphael Varane que coronarían en 2018.
Después de haber perdido la final de la Euro 2016 en su propio país, Pogba encabezó el título del Mundial 2018 junto a Kylian Mbappé, en donde se encontró con Lionel Messi. El por entonces jugador del Manchester United, después de eliminar a la Argentina en octavos de final por 4-3 se acercó directamente a La Pulga para consolarlo en una imagen que recorrió el mundo.
“Hemos jugado con el mejor jugador del mundo. ¿Por cuánto tiempo? ¿Por diez años? Diez años que lo veo, que aprendo de él”, declaró en aquel momento y se rindió: “Me hace amar el fútbol siempre, pero queremos jugar contra los mejores y hoy ganamos contra los mejores”.
Escándalos de brujería y denuncias de extorsión
Como sostiene el lema de Hollywood, Pogba cumplió con la ley de que todo lo que sube tiene que bajar y así empezaron los problemas. Después de ganar el Mundial, el mediocampista comenzó una serie de lesiones musculares que lo relegaron de varios partidos en un Manchester United que lejos de brillar parecía abrazar fracasos y desazones. Pero su peor lesión llegó en 2022 con una rotura de meniscos en la rodilla que lo obligó a operarse.
Al mismo tiempo empezaron a acumularse escándalos. El más reconocido fue el de brujería, cuando en 2022 su hermano Mathias, en una serie de videos en redes sociales, reveló que Paul había asistido a un brujo para ganar el Mundial de Francia y para hechizar a Kylian Mbappé.
“Este individuo, mi hermano, se ha hecho adepto a la brujería en los últimos años, convirtiéndose en seguidor de un brujo, conocido como el morabito Ibrahim, llamado Grande, estrecho colaborador del exjugador Alou Diarra, quien se dice que lo conoció a través del jugador Serge Aurier“, reveló.
France Info publicó en aquel entonces que el futbolista del Manchester United había admitido la contratación de un brujo, pero no para perjudicar a Mbappé, por lo que Kylian lo habría perdonado. Al mismo tiempo, denunció ante la Justicia extorsiones contra su familia, puntualmente contra su madre y su hermano.
Susupensión por dopaje y nueva vida
En febrero de este año, El Tribunal Antidopaje de Italia sancionó a Paul Pogba con cuatro años de inactividad tras dar positivo por la hormona DHEA, conocida como “hormona de la juventud”, en un control antidopaje. Esta decisión se originó después de un partido entre la Juventus y Udinese el 20 de agosto.
El francés, que en ese momento tenía 30 años, defendió su caso alegando que la ingesta de la sustancia prohibida fue accidental y se negó a aceptar un acuerdo con la fiscalía que habría reducido su sanción a la mitad.
“Estoy triste, conmocionado y desconsolado porque todo lo que he construido en mi carrera como jugador profesional me ha sido arrebatado. Cuando esté libre de restricciones legales, la historia completa quedará clara, pero nunca he tomado, consciente o deliberadamente, ningún suplemento que viole las normas antidopaje”, declaró en ese entonces.
Ahora, alejado del fútbol, Pogba ha incursionado en una nueva vida. El fin de semana, por ejemplo, fue visto en Estados Unidos, al asistir a un partido del Inter Miami de Lionel Messi.
Además, en mayo de este año el portal de noticia Le Parisien reveló que el futbolista forma parte del reparto de la nueva película 4 Zeros, secuela de 3 Zeros, en donde interpreta a un profesor de jóvenes talentos. El film se estrenará en abril de 2025.