Allá por 2017, Marcelo Gallardo patentó el término “guardia alta” para marcar algunas fallas del arbitraje en contra de River. En el último tiempo, las decisiones de los encargados de impartir justicia volvieron a estar en el plano principal, y al Muñeco le volvieron a pedir su opinión sobre lo sucedido. Fiel a su estilo, respondió sin filtro.

“Hay cosas puntuales que me sorprenden. Hoy hay cámaras, los árbitros tienen la posibilidad de observar 48 mil repeticionesy tienen que errar mucho menos. Mucho menos. Hoy tienen los fundamentos y lasherramientas para hacerlo. Son muchos errores, no hablo solamente de los nuestros”, soltó el DT.

Luego mandó un mensaje con un destinatario bien definido: “Lo único que le pido a los árbitros, que hicieron alarde de que se capacitaron y están fallando, es que erren menos. Están fallando, todos han sufrido. Y sigue siendo el ojo humano”.

Al entrenador también le preguntaron por su cruce con el árbitro Nicolás Lamolina en el último River-Godoy Cruz: “La expulsión de Aliendro tenés la posibilidad de observarla, no podés errar por tanto. Estás observando la jugada. El jugador nunca lo toca. Es tremendo el error”.

Además, habló de su expulsión:“Ni siquiera fue un insulto, me arrepiento si le hubiese dicho algo malo. Tampoco fue para tanto.¿Quién de acá no dijo alguna vez boludo o pelotudo en un momento así? Cuando se equivocan tan feamente, te saca. Yo soy temperamental. En mi vida soy así. Tengo esas respuestas. No me enorgullecen, pero me definen. Y me equivoco como todos”.