Para todo el Mundo Boca, incluyendo allí al grupo de los hinchas, los dirigentes, los jugadores y el cuerpo técnico, está más que claro que el enfoque y la prioridad es la Copa Libertadores. Esto se notó en el partido ante Banfield, ya que Sebastián Battaglia decidió optar por un once con totalidad de suplentes debido a que el duelo por Liga Profesional contra el Taladro era en medio de la ida y la vuelta ante Corinthians por los octavos de la disputa copera.

Y si bien desde los nombres el equipo planteado por el entrenador xeneize no era inferior al de Claudio Vivas, en el rendimiento durante los 90 minutos sí se vieron diferencias y Boca jugó muy mal ante un Banfield notoriamente superior. El resultado lo demostró, ya que la visita se llevó un contundente 3 a 0 que dejó demostrado que hay una gran brecha entre titulares y suplentes en el club de la Ribera.

En lo que fue este flojísimo partido de Boca en líneas generales, los hinchas del Xeneize se manifestaron hacia los malos rendimientos individuales de varios de los futbolistas. Desde experimentados como Nicolás Orsini, Juan Ramírez y Esteban Rolón, hasta juveniles como Gastón Ávila y Marcelo Weigandt. Con este útlimo, es con el que fueron más duros debido a sus últimos encuentros en sí, en los que el Chelo no logra encontrarle la vuelta al equipo y no tiene buenos minutos hace tiempo.

Muchos de ellos se atrevieron incluso a justificar este rendimiento suyo por los rumores y las ofertas que hay por él desde clubes como Rosario Central y Gimnasia, quienes se manifestaron interesados en el nacido en Monte Chingolo y donde Weigandt tendría mucha más continuidad.

No quedan dudas que el lateral derecho fue uno de los puntos más flojos del Boca alternativo que planteó Battaglia, ya que por su sector se dieron la mayoría de los desbordes que generaron peligro o que incluso terminaron en gol. Y en ofensiva tampoco tuvo participación activa. Los hinchas, se enojaron con él. Las reacciones...