La brutal pelea entre Darío Benedetto y Carlos Zambrano generó una fuerte interna en Boca. El Consejo de Fútbol decidió sancionar a ambos jugadores con dos partidos sin ser convocados pero el debate quedó instalado: ¿hasta dónde es una cuestión de vestuario y qué tan importante es la imagen que queda del club?
Lucas Castromán, quien jugó en el Xeneize en 2008, fue consultado por el tema en “Mundo Boca Radio” y marcó su postura al respecto, con una anécdota inédita. “Si la pelea entre Benedetto y Zambrano sirvió para mejorar el clima, puede llegar a servir. En su momento tuve una agarrada con el Tano Gracian en Vélez, casi nos vamos a las manos“, reveló.
Fuente: @Velez
“Estuve en vestuarios donde se agarraban del cogote o se cacheteaban pero no salía nada a la luz. El tema es que en Boca sale todo a la prensa y eso no ayuda”, amplió Castromán. Y luego se metió con la actualidad futbolística del equipo: “Ibarra no es boludo, sabe que tiene que poner lo mejor que tiene. Es muy complejo ser técnico en este país y en este fútbol. Después de mi experiencia en Chacarita llegué a esa conclusión”.
Para Lucas, la gran diferencia a favor del DT actual es que puede trabajar con la tranquilidad de saber que es respaldado por la dirigencia. “Ibarra puede trabajar más tranquilo porque tiene la banca del Consejo de Fútbol y de Román, que lo conocen muy bien. Esto también lo vimos en la Selección, todos ahí entendieron que armando un grupo se podía conseguir algo“, sostuvo el exdelantero.