Inter de Milán lleva adelante una reconstrucción en parte deseada y en parte obligada tras un final de temporada que golpeó al plantel, especialmente por la dura derrota sufrida ante PSG en la final de la Champions League, y lo dejó sin entrenador por la decisión de Simone Inzaghi de marcharse para tomar el mando del Al Hilal en el Mundial de Clubes.
El certamen internacional FIFA del que también participó el equipo italiano, con Cristian Chivu como entrenador designado, no hizo otra cosa que profundizar la crisis, con eliminación en octavos de final a manos de Fluminense y una dura crítica de Lautaro Martínez, su capitán, que generó distancia y tirantez con otros futbolistas.
Uno de ellos fue Denzel Dumfries, quien no solo tomó partido por Hakan Calhanoglu cuando el argentino lo dejó expuesto acusándolo de querer marcharse rumbo a Galatasaray, sino que también quedó molesto por el hecho de que este haya minimizado su cruce con Marcos Acuña, jugador de River, durante la fase de grupos del Mundial de Clubes, en el que habría sido víctimas de manifestaciones racistas.
Al igual que Marcus Thuram, delantero para el que Inter de Milán ya fichó a Ange Yoan Bonny como alternativa, el defensor neerlandés fue uno de los primeros en solidarizarse con Calhanoglu tras la respuesta que hizo llegar en redes sociales, en la que apuntó a que “el verdadero líder es el que permanece al lado de sus compañeros, no el que busca culpables cuando es más fácil hacerlo”. Pero esto no haría otra cosa que alejarlo del equipo.
La cláusula de rescisión de Dumfries es de 25 millones de euros.
Con una cláusula de rescisión de 25 millones de euros y pretendientes de la talla de Barcelona y Manchester City, Denzel Dumfries podría estar atravesando sus últimos días en el equipo italiano tras su distanciamiento de Lautaro Martínez y es su agente Jorge Mendes quien está llevando adelante las negociaciones para encontrarle un nuevo destino.
¿Avanza Barcelona?
Según el diario Sport, Hansi Flick ha mostrado interés en la posibilidad de sumar a Denzel Dumfries como refuerzo y para la dirigencia del Barcelona es una oportunidad accesible desde lo económico, tanto por el valor de su cláusula como por un salario que se ajusta perfectamente a su presupuesto.
“Dumfries es el tipo de lateral que gusta al técnico blaugrana por su explosividad física y su velocidad”, se justificó en el portal español, en el que además se destacó el aporte clave del neerlandés en la serie de semifinales de la Champions League en que Inter eliminó al Barcelona.
El conflicto interno de Inter
“El que se quiera ir, que se vaya”, sentenció Lautaro Martínez tras la eliminación de Inter en el Mundial de Clubes, poniendo en evidencia un conflicto interno que Cristian Chivu está intentando desactivar. El propio presidente del club Giuseppe Marotta interpretó públicamente que había sido dirigida a Hakan Calhanoglu, en conversaciones con Galatasaray, y el turco salió a responder en redes sociales. “Tuve el honor de ser el capitán de mi selección. Y allí aprendí que el verdadero líder es el que permanece al lado de sus compañeros, no el que busca culpables cuando es más fácil hacerlo”, dijo como devolución de gentilezas.
Otro foco de conflicto se encendió entre aquellos futbolistas que no se habrían tomado bien las declaraciones de Lautaro Martínez y decidieron ponerse del lado del señalado Calhanoglu expresándole su solidaridad. Según TMW, el neerlandés Denzel Dumfries y el francés Marcus Thuram fueron los primeros en llamar al futbolista turco luego que hiciera su descargo en redes sociales. Dumfries, de hecho, tampoco se habría sentido a gusto con las declaraciones del capitán minimizando su pelea con Marcos Acuña en el partido de fase de grupos ante River, que según revelaron algunos portales italianos habría incluido manifestaciones racistas de parte del argentino hacia él.
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