Mientras una mitad del box de Ferrari está de fiesta por la extraordinaria pole position de Charles Leclerc para el Gran Premio de Hungría, en la otra mitad todo es frustración, incertidumbre y malestar. Y es que Lewis Hamilton se mostró sumamente crítico consigo mismo tras no haber sido capaz de pasar el corte a Q3.
Hamilton enfureció tras enterarse que su esfuerzo apenas había sido suficiente para quedar duodécimo, y que ese sería su lugar de partida. Pero su enojo no es con el equipo, e incluso llegó a admitir que sus actuaciones personales ponen en riesgo su futuro en Ferrari.
“Sí, soy yo, cada vez. Soy un inútil, completamente inútil“, declaró Hamilton ante los micrófonos de Sky Sports tras la clasificación en el Hungaroring. “El equipo no tiene ningún problema, el otro auto está en la pole, así que probablemente sólo deberían cambiar de piloto“, completó con crudeza el siete veces campeón del mundo.
El sábado, un dolor de cabeza para Hamilton
Desde su llegada a Ferrari, Lewis Hamilton sólo fue capaz de ganar una carrera, la Sprint en China. Sin embargo, ahí quedan los grandes resultados del británico; no se ha subido al podio en ninguna carrera completa, con tres cuartos puestos (Emilia Romaña, Austria y Gran Bretaña) como mejores resultados.

Hamilton, frustrado tras su clasificación en Hungría.
Y si bien el último fin de semana en Bélgica fue elegido como el mejor piloto del domingo por su remontada hasta el séptimo puesto, el problema fue que largó 16º, tras quedar afuera en Q1. Fue la primera vez que le pasó en su etapa en Ferrari, pero es algo a lo que Lewis no está acostumbrado.
Otras dos veces se quedó afuera en Q2, y aunque luego suele recuperar en carrera, sus clasificaciones están afectando claramente sus resultados del domingo. De momento Charles Leclerc lo supera 11 a 2 en resultados en carrera, y 10 a 4 en clasificaciones, una clara muestra de que el monegasco está siendo el primer piloto de la escudería.







