Se jugó como una final, con el cuchillo entre los dientes y ambos equipos tuvieron sus oportunidades de gol, haciendo figura a los dos arqueros, que con grandes atajadas mantuvieron su arco en 0. 

 

En el primer tiempo, fue Estudiantes quien tomó la iniciativa. Con el público a su favor y la necesidad de ganar debido a que la Gloria tiene ventaja deportiva, con más empuje que juego empezó a manejar las riendas del partido. La primera acción de peligro fue casi a la media hora de juego, luego de una gran jugada de González, que le cedió la pelota a Acosta, haciendo lucir a Carranza, la figura de la noche. La visita respondió rápidamente con una jugada de Graciani por derecha, que remató desviado al primer palo. 

Finalizando el primer tiempo, tuvo otra posibilidad de gol el local, con un desborde y centro rasante de Fernández por izquierda, y Pereyra, tras un rebote corto de Carranza, remató por arriba del travesaño, dentro del área chica. 

 

El transcurso del segundo tiempo fue similar, con los dos equipos yendo a un golpe por golpe. La primera, fue para el elenco cordobés, luego de una mala salida del arquero Bruera, que fue salvado por Bruno, quien se tiró para tapar el remate de Rodríguez con el arco a su merced. Dos minutos después, Estudiantes tuvo las situaciones más claras del partido, teniendo 4 posibilidades consecutivas.

La primera, fue un remate lejano de Minervino, que se le movió en el camino a Carranza, que dio rebote. En el rebote, Castelli remató, estrellando el remate contra el palo. Luego, fue González quien llegó a pegarle al arco de arremetida, encontrándose nuevamente con las manos de Carranza, y por útlimo, volvió a cabecear Castelli, y Cerato rechazó en la línea. 

Las últimas, fueron para la Gloria, con un mano a mano de Cucchi tapado por Bruera, y luego el remate de Rodríguez salió apenas desviado.

Con este resultado, Instituto necesita un empate en su cancha en la revancha el próximo sábado para ascender a primera, mientras que Estudiantes deberá ganar para lograr el ascenso.