Con River en ventaja sobre un Independiente que ya jugaba con uno menos, Martín Demichelisdecidió ir por más e incluyó en su equipo a un doble nueve que entraba para liquidar la historia. Un cambio que, más allá del disgusto de muchos hinchas, terminó cumpliendo con su función.
A pura potencia y determinación, Miguel Borja fue quien calló algunas críticas que bajaron desde las tribunas durante los minutos que le tocó estar en cancha con un lindo remate cruzado que le permitió no solo darle la victoria a River sino también mostrar un poco la molestia que tiene con esta situación.
Serio pese a que todo el equipo fue a felicitarlo, Borja no hizo su característico festejo denominado colibrí en el segundo de River y explicó los motivos: "Hoy no quise hacerlo porque lo sentí así", confesó ante las cámaras de ESPN con un ánimo un poco mejorado y más alegre.
Siendo foco de algunos comentarios críticos de los hinchas en los últimos días, más que nada en las redes, el disgusto de Borja pareciera venir de antemano ya que confesó que "le había avisado a mis compañeros en el banco que iba a hacer un gol y no lo iba hacer". Soltó antes de aclarar que "cumplí".
Finalmente, confirmando la teoría de que tiene algunas molestias, el delantero explicó que estas decisiones son "cosas que tiene el jugador" pero confió en que, dentro de un futuro, "ya van a venir nuevamente".
