Colo Colo estaba ilusionado con dar espectáculo ante Boca Juniors en el Estadio Monumental por la Copa Libertadores. Sin embargo, el equipo albo no pudo doblegar al multicampeón argentino y del certamen continental. Ante 24 mil espectadores, el Cacique perdió por 2-0 ante el Xeneize, que sacó superioridad en los momentos claves.
La pelea en la cancha de planteles ya era disímil para Colo Colo, que tiene un plantel cuatro veces por menor a lo demostrado por Boca Juniors con varias figuras con un costo millonario. Pese a ello, en algunos pasajes, el Cacique sí dio pelea, pero se desmoronó rápidamente con el golazo de Luis Advíncula.
El peruano que ahora es extremo en el esquema de Jorge Almirón inventó una tremenda jugada, se sacó sin problemas a Agustín Bouzat y el seleccionado del Rímac no tuvo dramas para sacar un zurdazo cruzado fuera del área, que tuvo una reacción algo tardía de Fernando de Paul para el 1-0 a los 12 minutos de partido.
Luego, en la primera fracción, Gustavo Quinteros perdió los estribos en varias ocasiones, se enfrascó en un áspero duelo con Raphael Claus y tampoco tuvo la calma para poder pausar a los suyos. Colo Colo intentó centro a la olla y que el joven Damián Pizarro se las arreglara como fuera. Rescatable el ímpetu del joven, que por personalidad no se queda y que tuvo un gol en sus pies.
En la segunda parte, Colo Colo se llenó de tarjetas amarillas y eso condicionó el partido. Luego, en la visita, Barco sacó todos sus créditos y jugó una tremenda etapa de complemento. Por el carril izquierdo sacó ventajas importantes. Ya en el 64′, Maxi Falcón cometió un error grosero ante la carga de Luis Vásquez y eso bastó para que Sebastián Villa quedara con la pelota a su merced para el 2-0 definitivo.
En el 66′, la torpeza de Carlos Palacios fue evidente. Claus no fue Papá Noel y sacó una roja que terminó de rematar las intenciones albas de ir a la pelea. El control del partido fue de Boca con un solvente Pol Fernández, el desplante de Advíncula, la experiencia de Chiquito Romero, quien estuvo 10 puntos cuando fue requerido y así suma y sigue. En tanto, elementos como Leo Gil y Bouzat, porejemplo, pasaron desapercibidos en pasajes fundamentales del pleito.
Sobre el final, Quinteros intentó dar la pelea con la inclusión de algunos jóvenes como Alexander Oroz o Lucas Soto y Vicente Pizarro, quien pese a tener algo más de experiencia, aún no es ese jugador avezado que sí puede resolver partido. Colo Colo quedó entregado a su suerte y eso se notó. Un golpe al mentón, un bálsamo de realidad, porque el Cacique y el fútbol chileno está a años luz de ir a pelear en serio por una Libertadores.
