Darío Lezcano pasó de ser la gran figura que llegó a Colo Colo a simplemente ser uno de los jugadores descartables por Gustavo Quinteros en el Cacique. El artillero paraguayo llegó con rótulo de crack al fútbol chileno, luego de su paso por el FC Juárez en México más sus aventuras en el Ingolstadt 04 de la Bundesliga en Alemania y su paso por Suiza en Europa. Sin embargo, en la actualidad, el artillero se quedó sin lugar en el ataque del cuadro popular.
Lezcano sólo logro ser titular en un partido de la temporada ante Cobresal. De ahí en adelante, los problemas físicos sacudieron al jugador guaraní, quien tiene 3 goles a su haber durante toda la campaña. Ahora, el delantero está enfocado en volver a ser confiable para los albos y, además, sí quiere pelear por un puesto en el ataque del actual campeón nacional.
Por ello, Lezcano empezó con un plan de trabajo para lograr la puesta a punto que necesita Gustavo Quinteros y, además, está realizando un tratamiento para sortear un golpe a la rodilla, que lo tuvo parado durante un par de semanas sin rendir al ciento por ciento en lo físico, situación que preocupa y bastante en el cuerpo técnico de Colo Colo.
Según Dale Albo, Lezcano inició un tratamiento con ácido hialurónico, con el fin de recuperarse lo antes posible y ponerse a disposición del equipo, para afrontar de mejor manera los partidos de la Copa Libertadores y también del Torneo Nacional.
Los plazos de mejoría que debería tener Lezcano es de cerca de 10 días, aunque esta situación médica podría adelantarse un par de días, para estar en buenas condiciones para las próximas fechas en las que Colo Colo tiene que jugar contra La Calera y Boca Juniors por la Copa.
Para el partido de mañana, por la Copa Libertadores ante el Monagas, Lezcano quedó absolutamente descartado y ni siquiera fue convocado por el cuerpo técnico, ya que al realizarse este tratamiento se privilegió el estado físico del futbolista.
Según el listado que entrega Transfermarkt, Lezcano, a lo largo de su carrera, sufrió dos lesiones serias que le reportaron varios meses fuera de las canchas. Una de ellas fue un daño de menisco en la temporada 2012/13 en el Luzern de Suiza, mientras que la más reciente fue en la campaña 2021/22 en México jugando en Juárez. Ahí, el paraguayo sufrió la rotura del tendón de Aquiles, en la que estuvo fuera 209 días y se perdió 21 partidos.