Un estadio Monumental hasta las banderas fue el escenario preciso para una noche de Copa Libertadores como las de antaño y desde el principio quedó claro que sería un duelo de alto voltaje.
River Plate comenzó mejor parándose con personalidad en Macul, emparejando las cosas Colo Colo en una buena jugada donde se juntaron Javier Correa y Leonardo Gil, estrellando este último su disparo en el horizontal del arco millonario ante la estirada de Franco Armani.
Los albos subieron su rendimiento y un error de Paulo Díaz lo aprovechó Correa para la una salvada espectacular del arquero campeón del mundo.
La ley del fútbol de que “gol que no se marca en un arco se convierte en el otro” se dio en esta ocasión para la mala suerte de los albos.
Tiro libre desde la izquierda ejecutado por Marcos Acuña y la aparición fantasmal de Germán Pezzella para empujar con el muslo hacia el arco de Colo Colo y abrir la cuenta.
El segundo tiempo fue casi todo para el cuadro local, que neutralizó al equipo de Marcelo Gallardo, y en una gran habilitación de Arturo Vidal, Carlos Palacios logró el empate que en primera instancia había sido anulado por fuera de juego, algo que corrigió el VAR, siendo el 1-1 para Colo Colo.
Tanto Almirón como el Muñeco hicieron cambios, donde River se cerró renunciando a atacar.
Cuando el empate estaba sellado, vino una disputa en un tiro de esquina en favor del cuadro argentino, con agresión entre Maximiliano Falcón y Paulo Díaz, siendo expulsados los dos.
En la agonía el paraguayo Guillermo Paiva ganó de altura y su cabezazo fue enviado al tiro de esquina por Armani.
Ahora todo queda abierto para la revancha que se jugará el próximo martes 24 de septiembre en el Estadio Monumental de River Plate.
