El Inter de Milán de los chilenos Alexis Sánchez y Arturo Vidal derrotó por 3-0 a su clásico rival en el Derby Della Madonnina y se instaló de lleno en la gran final de la Copa Italia, en donde espera por el ganador de la otra semifinal que la disputa la Fiorentina con la Juventus.
El primer tiempo arrancó con un ritmo vertiginoso y no pudo haber empezado de la mejor manera, después de que Lautaro Martínez pusiera la apertura de la cuenta con un verdadero golazo.
El equipo de Zlatan Ibrahimovic, quien vio el partido desde las tribunas, no se pudo acomodar en el campo de juego y siempre se le vio incómodo ante un Inter que le cortó todos los circuitos en el mediocampo.
Cuando la primera fracción estaba por terminar y parecía que los equipos se iban al descanso con el 1-0 de los neroazzurros, Lautaro Martínez volvió a aparecer para poner el 2-0 que, a la larga, sería irremontable para el Milan.
El segundo tiempo vio un ritmo un poco más lento y pausado, con el Inter sacando el pie del acelerador y dejando que el Milan se atreviera a más. El descuento llegó pasado el minuto 65, pero, tras revisión del VAR, se anuló.
En el minuto 69 y 72 ingresaron Alexis Sánchez y Arturo Vidal, respectivamente. Los chilenos se mostraron bastante movedizos en la mitad de la cancha y aportaron en lo que pudieron en un partido que ya estaba sentenciado y en donde el gol anulado golpeó al Milan que se quedó sin reacción. En el 82, Vidal habilitó a Marcelo Brozovic, quien centró para Robin Gosens y puso el 3-0 y la lápida final del encuentro.
De esta manera, el Inter de Milán dirigido por Simone Inzaghi se instaló en la gran final de la Copa Italia, en donde podría darse un nuevo clásico si es que la Juventus se impone a la Fiorentina en la semifinal de vuelta a disputarse mañana.