Una durísima situación es la que está viviendo el delantero Job Bogmis en la Primera B del fútbol chileno. Ayer, el delantero de la Universidad de Concepciónacusó ser tratado de mala forma por uno de sus rivales de Santiago Wanderers, en el partido que el Decano ganó por 2-0 en el Estadio Ester Roa penquista. Es más, el camerunés acusó de tratos racistas a un rival del cuadro de Valparaíso.

Bogmis, de origen camerunés, fue tajante al contar su historia y el delantero rompió en llanto tras el partido rumbo a camarines. El artillero acusó directamente a Pablo Corral, volante de Wanderers y exjugador de la Universidad Católica, de haberlo tratado de mala forma. “Son cosas difíciles cuando un rival te dice ‘negrito’ (sic). Por eso me molesté. Fue (Pablo) Corral”, acusó el jugador del Campanil en el Diario Concepción.

La situación de Bogmis fue advertida por el árbitro Felipe Jara en el sexto minuto de adición. El camerunés reclamaba, al borde de las lágrimas, la compleja situación. Salido de sus casillas, el delantero estuvo a punto de perder la compostura y el jugador de la UdeConce tuvo que ser contenido por Rodrigo González al interior de la cancha en un tiro libre favorable a la visita.

El relato de Bogmis es estremecedor y acusa directamente al exjugador de la UC y de Curicó Unido. “Sé que no soy de este país, pero uno se tiene que sentir bien en todos lados. Somos todos humanos. Es un tema discriminatorio que me molesta mucho. Somos todos humanos que jugamos para nuestras familias, nuestros amigos y nuestros sueños”, agregó el camerunés.

Job Bogmis fue tratado en forma racista por un rival en la Primera B (Photosport)

Bogmis, quien llegó a la cantera de la Universidad de Concepción y fue subido al primer equipo del Campanil hace un par de temporadas, reconoció que Carlos Muñoz fue el único rival que lo intentó contener tras el partido. Es más, el delantero abrazó al jugador extranjero. En su relato, el artillero declaró directo en contra de Pablo Corral.

“Corral no me pidió disculpas (…) Me duele esto, no estoy en mi país y me debo sentir libre donde sea. Tengo el respaldo de mis compañeros (…) Son palabras que duelen, nunca había vivido esto, nunca me había pasado”, siguió Bogmis.

Una complicada situación por lo que comenta Job Bogmis, quien es carta fija en el ataque estudiantil del cuadro de Miguel Ramírez. La situación es dolorosa, ya que el jugador está solo en Concepción y su familia está en Camerún. “Sé que cada sueño tiene un sacrificio y después viene la recompensa. Lo primero es sacar a la Universidad de Concepción del momento en el que está”, sentenció.