La obtención de la Copa del Mundo en Qatar 2022para la Selección de Argentina generó un revuelo a nivel mundial. Muchos fanáticos empezaron a tatuarse imágenes del trofeo, de jugadores de la selección trasandina, el nombre de estos, entre otros. El que causó más impacto fue el del influencer colombiano, Mike Jambs, quien viralizo en sus redes sociales un vídeo donde aparecía marcándose el nombre de la granfigura albiceleste:Lionel Messi.

En las imagenesno solo se aprecia el nombre de la Pulgaen la frente, sino que también en la mejilla derecha estaba tatuado D10S y en la izquierda se apreciabatres estrellas, las cuales pertenecen a la cantidad de copas mundiales que tiene la Albiceleste. Las tomas causaron un gran revuelo en redes sociales, generando una ola de comentarios, tanto negativos como positivos.

Fue tanto el impacto, que el influencer fue entrevistadopor diversos medios del mundo, donde mostrabasu llamativo tatuaje. El29 de diciembre, Mike volvía a causar ruido, pero ahora por publicar un vídeo donde se le apreciaba arrepentido de haberse hecho esos tatuajes.

Influencer colombiano no se tatúa el nombre de Messi. (Instagram Mike Jambs)

“El experimento social”

Pero el revuelo tendría un final inesperado. El ahora famoso influencer en conversación con El Colombiano, medio local de su país, reconoció que todo se trataría de una mentira y que el tenía otra idea para el revuelo: “Lo que hice fue una broma. Quería mandar un mensaje positivo“, afirmó.

“Nunca pensé que el video llegara a tener tanta trascendencia, que llegara a convertirse a nivel mundial. Yo en un primer momento lo que hice fue reunirme con unos amigos, explicarles lo que quería hacer. Ellos me impulsaron. Lo hicimos, lo subí como cualquier otro video y al día siguienteempecé a ver las reacciones que generó en redes sociales y en los medios de comunicación”, asumió al diario.

Además de hablar con el diario, el influencer subió un video contando toda la verdad a su cuenta de Instagram, explicando que también era un experimento que realizó. “Todo fue parte de un experimento social, en el cual quedó evidenciado el daño que se le puede ocasionar a alguien por ser y pensar diferente, al punto de hacerla entrar en depresión”, cerró en su defensa.