En la Quinta Región están disfrutando con el gran momento de La Roja Sub 23 en los Juegos Panamericanos Santiago 2023. El equipo de Eduardo Berizzo se instaló en semifinales luego de ganar el Grupo A y va en busca de la medalla de oro.
Ayer en el Estadio Sausalito de Viña del Mar el combinado nacional goleó por 5-0 a República Dominicana en lo que fue un verdadero infierno para el elenco visitante, ya que además del frío y el baile que le dio Chile en cancha debieron lidiar con un ensordecedor ambiente.
Esto porque volvió con fuerza un viejo fenómeno que se hizo conocido a partir del Mundial de Sudáfrica 2010: las vuvuzelas.
El regreso de las vuvuzelas
Los comerciantes se ‘hicieron la América’ en la tarde del domingo en las afueras del reducto viñamarino, ya que este instrumento de animación se vendió como ‘pan caliente’.
Fueron miles de estas cornetas que hicieron que se volviera a sentir un ‘enjambre de abejas’ en el ambiente, utilizadas por niños y adultos.
Hasta el futbolista Javier Parraguez que llegó a ver a La Roja Sub 23 a la Ciudad Jardín tuvo palabras para este ambiente.
“Las vuvuzelas es debido a que las entradas están más accesibles para todo el público en general y es bonito, es lindo ver un estadio bien animado, con mucha gente que no tiene la oportunidad siempre de estar alentando a Chile. Se vio reflejado en la galería como todo el público está muy contento animando a la selección”, dijo el Búfalo en diálogo con Bolavip.
