Goles, un juego mágico y un título imborrable fue lo de Atlético Nacional hace cinco años, una Copa Libertadores que visitió de gloria a toda Colombia y le dio un poco más de brillo al fútbol colombiano. Un hito histórico para convertir su segundo título en uno de los torneos de clubes más importantes del planeta.

De la mano de Reinaldo Rueda, hoy entrenador de la Selección Colombia, Atlético Nacional logró lo que muchos veían lejano. El DT tomó un proceso maduro con Juan Carlos Osorio y lo llevó al límite, dándole ese título internacional que tanto pedían los hinchas y que todo el FPC palpitaba. Fue un notable proyecto.

Todo andaba a la perfección empezando por Franco Armani, un Alexis Henríquez hecho capitán al lado de un joven con mucha proyección como Dávinson Sánchez, un Sebastián Pérez convertido en el mejor volante 8 del momento junto al tándem con Alexander Mejía, goles de Miguel Ángel Borja y pase sde ensueño de Macnelly Torres y Alejandro Guerra. Un equipo hecho para ser campeón.

Se citó con Independiente del Valle en la gran final, un equipo que sorprendió ya que se esperaba un Boca Juniors o un River Plate en la final, se supo agrandar ante estos gigantes y así fue que llegó a la última instancia. Nacional hizo la fase de grupos de la historia y superó a Huracán en octavos, Rosario Central en cuartos y Sao Paulo en semifinal para quedar al lado de un inminente título.

El 27 de julio de 2016 fue bicampeón de la Copa Libertadores y quedó a la altura de los mejores clubes del mundo en ese momento. Lo que certificó su grandeza en Colombia y para muchos, en el continente. Hoy, Atlético Nacional busca la forma de volver a esas gigantes hazañas.