Paolo Guerrero tiene una obsesión este 2020. Una campeonato que le ha sido esquivo al Depredador ha sido la Copa Libertadores. 

Este año, el peruano la arrancó de la mejor manera. Pasaron la fase previa y en la primera fechas de grupos el peruano hizo un doblete para el triunfo de su equipo.

En la segunda jornada chocó contra nada menos que el Gremio en el Clásico Gaucho. Fue primera vez que este partido se jugó en la Libertadores y el peruano estuvo ahí. 

En un partido muy intenso, Guerrero fue protagonista de una jugada bastante polémica. Fue arriba a luchar contra un defensor y metió un codazo. 

El juez del partido no le sacó ni si quiera tarjeta amarilla. Obviamente, los locales pedían la expulsión. 

Igual, hay que decirlo, fue una jugada que pudo ser roja. El Depredador se salvó por poco ¡Muy peligroso Paolo!