Este martes, en la continuidad de los cuartos de final de la UEFA Europa League, se encontraron frente a frente dos equipos de muy buen presente como Sevilla y Wolverhampton Wanderers.

En ese contexto, el primero en tener una situación inmejorable para anotar fue la escuadra británica. Sin embargo, el mexicano Raúl Jiménez desperdició un tiro penal.

Posteriormente, el juego se hizo de ida y vuelta, con los conducidos tácticamente por Julen Lopetegui contando con las mejores oportunidades para quedarse con la victoria.

Así fue como, en la recta final del compromiso, una pelota aérea terminó significando el 1-0 de los españoles, que luego se quedarían con la anhelada clasificación.

El encargado del centro no fue otro que Ever Banega: el argentino sacó a relucir toda su calidad para encontrar la humanidad de un inspirado Lucas Ocampos, que sigue intratable.

El exjugador de River Plate, entre otros equipos, le dio una dirección excelente a la pelota para que se meta lejos de la figura de Rui Patricio, que no pudo hacer nada.