Todo está listo para las semifinales del Clausura 2022, en donde hay duelos llenos de contrastes pues entre los participantes hay un novato en estas instancias que no tiene nada que perder. Se trata nada más y nada menos que de Fernando “Tano” Ortiz, entrenador de las Águilas del América, situación que podría jugarle a favor o en contra dependiendo el sistema que implemente ante Pachuca.
Y es que en esta complicada contienda por el título el entrenador más experimentado en estas instancias es el controversial, Miguel Herrera, pues es el timonel con más experiencia, ya que el “Piojo” tiene un largo recorrido como estratega en el fútbol mexicano, pues inició su carrera en el ya lejano 2002, es decir, hace 20 años. Tiempo que se ha visto reflejado en su palmarés, donde registra dos títulos y 14 semifinales disputadas, sin contar las de este certamen.
Esto no garantiza un éxito rotundo, pero a diferencia del resto de entrenadores invitados, el “Tano” Ortiz no ha estado en Semifinales como entrenador, a pesar de que ya cuenta con un recorrido por el fútbol de Paraguay en Primera División, este sistema de competición no es por eliminación directa. A pesar de ello tiene una pequeña e inesperada ventaja, pues América es la plantilla más competitiva del torneo, lo que los ha ubicado entre los favoritos pese al torneo que tuvieron.
Mientras que Guillermo Almada, quien inició su carrera en el 2009, solo registra un título liguero con el Barcelona de Guayaquil en Ecuador en el 2016. A su llegada a México dejó un buen sabor de boca con Santos Laguna, donde obtuvo el subcampeonato del Clausura 2021, por lo que registra apenas una semifinal en la Liga MX, pero eso ya lo pone en ventaja sobre el timonel americanista.
Situación similar a la que vive el actual campeón del futbol mexicano, Diego Cocca, quien jugó, dirigió y ya tiene experiencia en el timón de los clubes de México, por lo que conoce la competición de pies a cabeza. A pesar de que como jugador no destacó tanto, como entrenador disputó su segunda semifinal el torneo pasado, donde se impuso a los Pumas y a la postre salió campeón con el Atlas, cortando una sequía de títulos de 70 años.