Hasta antes de la derrota con Terence Crawford en septiembre, Canelo Álvarez se encontraba en la cima del boxeo, siendo la cara del deporte y con muchos expertos creyendo que iba a derrotar al estadounidense sin mayores problemas, más que nada por la diferencia de peso que existía entre ambos. Sin embargo, Bud se encargó de crear un escenario inesperado, en el que el mundo del tapatío quedó de cabeza y el futuro del deporte mexicano tambaleante.
Aunque por estos tiempos se está especulando con una posible revancha entre Canelo y Crawford, lo cierto es que desde el pasado 13 de septiembre algo ha cambiado, se ha roto y no ha vuelto a seguir igual. No hay que tenerle miedo al aceptar que es un mal momento del boxeo mexicano, porque es la única forma de reconocer que algo no se está realizando bien. En caso contrario, creyendo que el camino es el correcto, no servirá para más nada que generar falsas ilusiones y continuar tropezando con la misma roca.
El duro momento que vive el boxeo mexicano
No es que el resto haya elevado su nivel sustancialmente, sino que el mexicano ha perdido prestigio, ha dejado ir algo del éxito que supo conseguir durante tantos años de gloria. Para México el boxeo es parte fundamental de la historia, por lo que no es cuestión de aceptar un mal momento como si fuera normal. Porque podemos estar de acuerdo en que puede ser algo que sucede, pero la realidad es que pasarlo por alto es la peor decisión que se puede hacer, y eso es justamente lo que parece estar sucediendo.
Por una cuestión cronológica, el final de la carrera de Canelo está más cerca que lejos y no hay muchos nombres que aparezcan en el radar como capacitados para continuar con el legado de Saúl. En algún momento irrumpió Jaime Munguía como un interesante prospecto, pero él solito se encargó de dejar en claro que su nivel tenía un límite muy marcado en el crecimiento.
Se podría hablar de Pitbull Cruz, quien acostumbra a dar verdaderas guerras, pero sin terminar de asentarse como se podría esperar. El campeón que más brillo tiene por estos tiempos es el Divino Espinoza, pero el reconocimiento público del monarca no se acerca, ni por asomo, al que debería tener alguien que va camino en transformarse en la cara del deporte.
Hay dos aspectos claves en los que el boxeo mexicano está fallando. El hecho de confiar en la masividad de las redes sociales como único o principal medio de difusión es un error, porque lo tradicional sigue funcionando y los protagonistas no se muestran cercanos a las entrevistas para que el público los pueda conocer todavía más. Además, no se está consiguiendo aprovechar del todo la materia prima, por lo que no se especula con que una nueva estrella pueda emerger para tomar un rol protagónico. Mucho por corregir…
En síntesis
- Canelo Álvarez perdió contra Terence Crawford en septiembre, afectando el prestigio del boxeo mexicano.
- Jaime Munguía, Pitbull Cruz y Divino Espinoza son nombres destacados, pero no alcanzan el nivel de Canelo.
- El boxeo mexicano tiene fallas en la difusión al depender de redes sociales y no aprovechar la materia prima.
