Tras el Gran Premio de Brasil, que terminó en victoria para George Russell, las cosas no quedaron de la mejor manera entre Max Verstappen y Checo Pérez. El neerlandés, bicampeon del mundo, no cumplió con la orden del equipo para dejar pasar al mexicano, lo que desató un gran escándalo con declaraciones cruzadas.

Checo Pérez le recriminó el gesto a Verstappen recordándole que ayudó de gran manera para sus dos consagraciones. Verstappen, por su parte, se mantuvo firme en su postura y explicó por qué no dejo pasar a su compañero. Aunque en los últimos días intentaron restarle importancia, el conflicto parece haber dejaso sus consecuencias.

En la previa al Gran Premio de Abu Dabi, Verstappen expresó: "Después de esa carrera, quedé muy mal ante los medios de comunicación. No tenían una imagen clara. Pero ponerme inmediatamente así es bastante rídiculo, para ser honesto. No saben cómo trabajo dentro del equipo. Y lo que el equipo aprecia de mí. Así que todas las cosas que he leído han sido bastante desagradables".

Verstappen se mostró principalmente molesto por los mensajes que recibieron sus familiares: "Además, empezaron a atacar a mi familia, amenazaron a mi hermana y a mi madre, a mi novia, a mi padre... y para mí, eso va demasiado lejos cuando no tienes los datos de lo que realmente está pasando. Y eso definitivamente tiene que parar. Si tienes un problema conmigo, está bien, pero no vayas a por mi familia porque eso es simplemente inaceptable. Pero, seguimos adelante. Sinceramente tengo una gran relación con Checo", afirmó en bicampeon.

¿Por qué no lo dejó pasar?

Acerca de sus motivos, Verstappen repitió su argumento sin dar mayores precisiones: "Fue por algo que sucedió a principios de la temporada y ya se lo expliqué (a Red Bull) en México. El equipo lo entendió y estuvo de acuerdo. Fuimos a Brasil y sólo pensé: 'sólo vamos a correr, a intentar conseguir el mejor resultado posible", reflexionó el neerlandés.