El 5 de marzo de 2022 quedará grabado como uno de los hechos más lamentables en la historia del futbol mexicano. La pelea campal en las gradas, entre aficionados de Querétaro y Atlas, llegó incluso hasta el campo y los pasillos de La Corregidora. El saldo fue de 29 personas heridas y un proceso penal que derivó en 73 detenciones.

A raíz de los lamentables hechos, Querétaro sufrió importantes pérdidas desde lo económico. Por empezar, destacan unos 19 millones 500 mil pesos que se dejaron de percibir a raíz de la disolución del contrato con la Sociedad Cooperativa Trabajadores Pascual S.C.L; el contrato con Industria de Refrescos S. de R.L. de C.V. corrió la misma suerte y se trataba de un convenio de 220 mil pesos.

Asimismo, según detalló Mediotiempo, la Federación Mexicana de Futbol (FMF) aplicó una multa de 1 millón 500 mil pesos, mientras que la reparación y sustitución de butacas dañadas costó 937 mil 467 pesos.

La bronca comenzó en las gradas y se trasladó al campo de juego (Imago7)

La bronca comenzó en las gradas y se trasladó al campo de juego (Imago7)

Por otro lado, Querétaro también debió hacer de local en otro Estadio y se eligió el Estadio Morelos, de la capital de Michoacán, por el cual se desembolsó una suma de 116 mil pesos en concepto de renta y 60 mil por concepto de operación. Incluso, fueron unos 16 encuentros de taquilla que tampoco pudieron ser percibidos.

La suma total que perdió Querétaro

En definitiva, los Gallos Blancos perdieron una millonada a raíz de la violencia ocurrida en La Corregidora el año pasado: 21 millones 398 mil 681 pesos, cifra que intentó cobrarse a las personas señaladas como culpables, aunque la demanda finalmente no tuvo lugar.