El 2022 de Paolo Guerrero fue muy malo, es más, el delantero peruano vivió la peor temporada de su vida futbolística, por ende quiere que se vaya luego el año y empezar un 2023 renovado.
El ex Bayern Múnich terminó su contrato con Avaí de Brasil y no seguirá jugando en el elenco de Florianópolis, elenco que perdió la categoría y en la campaña que viene jugará en la Serie B.
El Depredador está como jugador libre, es por ello que una vez su nombró empezó a sonar como opción en el club de sus amores, Alianza Lima, sin embargo está muy lejos de negociar un arribo a Matute.
Las ofertas no le faltan al atacante de 38 años, por ejemplo, Ceará del ascenso brasileño lo tiene en carpeta, pero eso no es todo, porque según dio a conocer Trome, Liga Deportiva Universitaria de Quito lo quiere como su 9 goleador para el año que se aproxima.
"Hoy en calidad de jugador libre y el capitán de la selección peruana parece una alternativa para la escuadra del entrenador argentino Luis Zubeldía, quien reconoce en Paolo Guerrero la jerarquía y recorrido internacional por Europa y exito en Brasil", explica el citado medio.
"Paolo Guerrero llegaría a Lima en las próximas horas, pero si se formaliza la propuesta de LDU, el atacante viajaría Quito para pasar las pruebas médicas, que se ha convertido en el principal requisito del cuadro albo para enrolarlo en sus filas", agregan.
De esta manera Guerrero puede recalar en un cuadro grande de la Conmebol, que ganó copas internacionales, y que en 2023 participará en la Copa Sudamericana, la cual espera ganar.
