El presente del Atlético de Madrid invita a pensar que a mitad de año se puede cerrar el exitoso ciclo de Diego Simeone. El Cholo que arribó en junio del 2011 procedente del Racing Club de Avellaneda, sin dudas, se encuentra transitando el momento más crítico desde que es entrenador del conjunto colchonero, club con el que consiguió, hasta entonces, ocho títulos.
Es que en la actual temporada el conjunto de la capital española quedó afuera de la UEFA Champions League en la fase de grupos, ni siquiera obtuvo el premio consuelo de participar de la ronda preliminar para los Octavos de Final de la Europa League, fue eliminado por el Real Madrid en los Cuartos de Final de la Copa del Rey y, como si fuera poco, en LaLiga anda a los tropezones.
Por eso, en cada conferencia de prensa de Diego Simeone son recurrentes las consultas sobre qué piensa que sucederá con su puesto al frente del Atlético de Madrid. Incluso, dejó la puerta abierta para que se de su salida, tras el 3 a 1 en el Santiago Bernabéu del pasado 26 de enero. ''Cuando termine la temporada nos sentaremos a analizar qué es lo mejor para todos'', lanzó.
En ese contexto, los nombres para suplantarlo no paran de desfilar. Pero hay uno en particular que, llamativamente, se postuló para que lo tengan en cuenta. Se trata de Germán Adrián Ramón Burgos, quien supo ser auxiliar del Cholo y que dejó de serlo en medio de rumores de ruptura de la relación que aparentaba ser una amistad.
“Yo sé que voy a pasar por el Atlético de Madrid como entrenador, River seguramente y también por la Selección Argentina. No me pongo techo para nada y sé que hay tiempo", dijo el Mono, quien, además, supo atajar en el rojiblanco entre el 2001 y el 2004, en el podcast Bendito Fútbol.
