No es un secreto: la temporada 2020 de la NFL ha sido un fracaso para los Dallas Cowboys y salvo un milagro de los dioses de los emparrillados la Postemporada parece un logro casi imposible de alcanzar. Frente a la gravísima lesión de Dak Prescott, el llamado a liderar la ofensiva de los Vaqueros era Ezekiel Elliott, pero…

El rendimiento del corredor de los Cowboys en el 2020 lo tiene con sus números menos eficientes desde que llegó a la NFL y frente al bajo nivel, los analistas expertos de ESPN plantean tres razones que justifican lo mal que está jugando Elliott. 

En los últimos cuatro partidos, Elliott no ha superado las 60 yardas por tierras y a lo largo de la temporada acumula cinco balones sueltos, cuatro de estos no recuperados. ¿Qué le pasa a Ezekiel? El hecho de jugar con cuatro quarterbacks diferente en cinco semanas ha afectado su rendimiento de manera sustancial.  

“Con nosotros jugando a cuatro quarterbacks en cinco semanas, sus pensamientos N° 1 son que hay que detener la carrera porque Zeke es un jugador tan dinámico. Dio una actuación valiente (vs. Pittsburgh Steelers) donde no fue capaz de entrenar. Ciertamente, una pequeña lesión de tendón de la corva que no lo ha dejado”, afirmó Stephen Jones, vicepresidente ejecutivo de Dallas Cowboys.

 

El bajo nivel de Ezekiel Elliott en Dallas Cowboys

A los 4 quarterbacks con los que ha tenido que jugar y la lesión que no lo tiene al 100%, los analistas justifican le suman una tercera razón al mal nivel de Ezekiel Elliott. Según ESPN Stats & Information, 36 de los 150 acarreos de Elliott fueron contra ocho o más defensivos lo que ha llevado a que promedie 1.75 yardas después del primer contacto.