Lejos de mostrar su mejor versión y gracias a un gol del francés, los Diablos Rojos cayeron 2-1 ante Hull City pero ganaron en el global 3-2 y jugarán la final de la EFL Cup. Los espera Southampton, que eliminó al Liverpool en Anfield.

$bp(“Brid_85470357”, {“id”:”6126″,”width”:”100%”,”height”:”400″,”video”:”109074″});

Por las semifinales de la Capital One, Hull City necesitaba de su gente en el KCOM Stadium para dar vuelta una serie muy complicada ante Manchester United: la ida había sido 2-0 para los Diablos Rojos.

Sin embargo, el local empezó mejor desde los doce pasos ante un José Mourinho que puso a su mejor once en cancha. Tom Huddlestone abrió el marcador de penal pasada la media hora de juego e ilusionó a los fanáticos.

Mourinho dirigirá su primera final como DT de Manchester United

En el comienzo de la segunda parte, Paul Pogba empató el partido de un puntazo cerca de la hora de juego. Tres goles y tres asistencias registra en los últimos once partidos el francés.

A falta de cinco para el pitazo final, David Meyler asistió a Omar Niasse para maquillar el resultado global para Hull City. Aunque la victoria ya era roja.

El 26 de febrero en Wembley, Manchester United definirá el título ante Southampton, que eliminó ayer al Liverpool en Anfield.