Un policía se sumó al canto de la hinchada en el estadio del Ídolo del astillero. Todos tienen derecho a alentar a su equipo.
En los estadios de Ecuador, desde hace ya algún tiempo no se han escuchado casos de delincuencia, en lo que va del año no ha habido nada que lamentar. Mucho de eso es gracias al trabajo policial. Cuando suceden cosas buenas, también hay que destacarlo. Y mucho de bueno tiene el fútbol, que permite que todos sean aficionados y todos tengan su corazón futbolero.
Acá una muestra: este oficial de la policía no se contuvo de cantar por su equipo.