Es verdad que, a pedido de Coudet, Jonatan Cristaldo no llevó a Racingla panza que lo acompañó durante su último paso por Vélez. Pero gordo o flaco, Churry está muy lejos de atravesar el mejor momento de su carrera.

Lo dejó muy claro en el partido que Racing y Rosario Central disputaron en El Cilindro de Avellaneda, en el que el local necesitaba recuperarse de la eliminación de la Copa Libertadores a manos de River.

Recibió la asistencia de Pol Fernández y, con el arquero ya vencido, le erró al arco en largo y en ancho.

Por suerte para el Churry, el juez de línea levantó su bandera y lo salvó de pasar a la posteridad como el autor del gol errado más increíble de la Superliga Argentina.