Corría noviembre del año pasado. Un mes antes de la gran victoria de Boca en el Monumental ante River, el equipo dirigido por Guillermo Barros Schelottoviajó a Sevilla para enfrentar al club homónimo por el Trofeo Antonio Puerta.
A partido único, el amistoso se juega cada año y tiene como objetivo rememorar al volante del club que falleció en agosto de 2007. En 2016, Boca fue invitado y derrotó al local por 4 a 3 en un partido que marcó un precedente en el funcionamiento delXeneizeque aún no se asentaba en la punta del torneo local.
Más de un año después del choque, el diarioAsde España reveló una curiosidad que dejó con la boca abierta a muchos: para aceptar jugar el partido a coste cero, el presidente de Boca Daniel Angelici le solicitó a José Castro, mandatario del Sevilla, que le regale una pata de jamón.
El abogado opositor Agustín Martínez señaló una irregularidad en el balance del club. El mismo indicaba que Castrohabía pagado con dinero del club “un jamón de 400 euros despiezado al corte pasa su uso personal”.
El presidente se defendió y contraatacó: “el jamón fue un regalo al presidente de Boca Juniors tras prometerme que su equipo vendría gratis a jugar el Trofeo Antonio Puerta, fíjese usted si salió barato el jamón”. ¡Se puso picante!