Pese al gol de Julián Álvarez, Inter de Porto Alegre había demostrado síntomas de buen juego y buscaba empatar el encuentro.

Después de varias ataques hasta el fondo del campo sin eficacia, Rafael Sóbis decidió cambiar la receta.

El atacante brasileño probó desde lejos y se mandó uno de los golazos de la jornada de Copa Libertadores.

El remate fue de izquierda a derecha y dejó parado a Franco Armani, quien ni siquiera advinió el lado a donde fue el remate.

¡Golazo!