Luego de grandes campañas a lo largo del torneo, River Plate y Flamengo accedieron a la gran final de la Copa Libertadores de América.
La misma, desde hace rato, tenía todo confirmado: se iba a disputar el próximo 23 de noviembre en el Estadio Nacional de Santiago de Chile.
Sin embargo, dicho país sudamericano se ve inmerso en grandes conflictos sociales y políticos, por lo que no hubo más remedio que cambiar la sede.
Este martes, las autoridades pertinentes se reunieron en la CONMEBOL, y, luego de varias horas de conversaciones, se terminó llegando a un acuerdo.
Lima (Perú), Asunción (Paraguay), Montevideo (Uruguay) y Medellín (Colombia) fueron quienes se perfialaron como opciones hasta último momento.
Y, finalmente, se llegó a un veredicto para que la capital peruana albergue el trascendental partido entre argentinos y brasileños el próximo sábado 23 de noviembre.
El partido se disputará en el Estadio Monumental de Lima y comenzará a las 15 horas de Perú y a las 17 horas de Argentina.