Convirtiéndose en un factor más que importante para el funcionamiento de la faceta ofensiva de Boca, Eduardo Salvio fue una de las claves con las que el Xeneize contó para coronarse como campeón de la Superliga Argentina 2019/2020.

Dejando de lado la comodidad que le representaba vivir en Europa, el Toto cambió Portugal por Argentina y al poco tiempo se dio el gusto de levantar un título con el club de sus amores. Pese a que el futbolista contó con el gran apoyo de su esposa e hijos, la Tota, su madre, se llevó todos los flashes en lo que fueron los festejos en la Bombonera.

En diálogo con FOX Sports, el atacante habló sobre la salud de su querida madre y afirmó: “Está con cuidados, pero mucho mejor. Tiene que seguir ciertos cuidados, pero está guardada. Si es por ella anda por cualquier lado”.

Recordando las horas previas al cruce ante Gimnasia de La Plata para definir al campeón del certamen local, el jugador rememoró: “Fue un momento muy especial. Antes del partido no quería que vaya a la cancha, era un partido de muchas emociones e intensidad y quería que ella esté tranquila en casa. Empezó a enviarle mensajes al médico. Terminó yendo a la cancha”.

Saltando al emotivo abrazo que protagonizó junto a la Tota una vez consumado el título, Salvio agregó: “Fue un momento hermoso. Ella vive muchísimo todo lo que es Boca y el fútbol, es lo más grande que hay. Me tenía mucha confianza”.

Viajando al pasado mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro, Eduardo reveló que junto a su madre se dio el gusto de ver en más de una oportunidad a Boca en vivo y en directo. “Ella me llevaba a la cancha cuando éramos chicos, íbamos los dos juntos a la tercera bandeja arriba de La 12”, cerró.