Son varias las razones para explicar por qué el Espanyol de Barcelona ocupa la última posición y cómodo de La Liga. Una de ellas quedó en evidencia en la última jornada, en la que pese a comenzar ganando terminó cayendo 2-1 ante Granada.
Precisamente fue el gol que lo puso en ventaja la propia tumba del equipo Perico, porque allí, en un penal, se rompieron varias relaciones que afectarían en la continuidad del encuentro.
El árbitro señaló penal y Raúl de Tomás tomó el balón para ejecutarlo porque se lo habían hecho a él. Jonathan Calleri llegó para pedirle el tiro, por entender que él era el designado.
Allí comenzó todo. RDT no solo no aceptó el pedido del argentino, sino que le respondió con un soberbio “el próximo lo pateas tú”. Y ante el desconcierto de Calleri, terminó de humillarlo: “Me estás molestando”.
El capitán Javi López tuvo que intervenir para que Calleri desistiera de una vez. El argentino lo hizo, aunque quedó visiblemente afectado por la situación.
Raúl de Tomás cambió penal por gol y el festejo se pareció muy poco a los de un equipo. Algo ya se había roto y Granada lo terminaría aprovechando.