James Rodríguez no se perdió el juego consagratorio del Real Madrid en LaLiga 19/20. Desde la tribuna, estuvo observando la apretada victoria de su equipo contra el Villarreal y luego bajó al césped para estar junto a sus compañero y levantar el título 34° de liga española para el onceno Merengue.
Mientras estuvo con sus compañeros, James se dejó ver feliz y se felicitó con sus colegas por el nuevo éxito conseguido para la Casa Blanca. Aunque el colombiano apenas jugó 8 partidos de las 38 jornadas, quiso compartir este momento que, quizá, sea el última que viva con la camiseta blanca del Merengue. Ya está dicho: el cafetero tiene los días contados en Madrid.
Sin embargo, hubo un detalle que no pasó desaércibido en las fotos que se tomaron del momento de la consagración. Como es tradicional en los clubes de fútbol, uno de los festejos es reunirse y, entre todos los jugadores, lanzar por los aires al técnico del equipo. Real Madrid lo hizo, pero James Rodríguez decidió apartarse y mirar de lejos sin participar en este momento.