La explosión del fútbol chino podría terminar en la organización del torneo que celebrará nada menos que el centenario mundialista.
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Que en China se han lanzado de lleno a la conquista del mundo del fútbol no es una novedad, ya que desde hace años se invierten millones para contrarrestar el déficit que tienen en un deporte que no es innato en su naturaleza pero que ha sabido conquistarlos por las maravillas que son capaces de hacer los cracks globales.
Un ejemplo de ello es la enorme escuela de fútbol que han establecido en Guangzhou, donde cientos de niños llegan de todo el país con el sueño de ser el nuevo Messi, el nuevo Cristiano, el crack que le hace falta al gigante asiático para entrar de lleno en la discusión.
Todos los chinos amantes del fútbol sueñan albergar un Mundial en el país
El poder económico de China ya sedujo a la FIFA, que podría alejarse de la clásica idea de celebrar el centenario de la Copa del Mundo en Uruguay, país donde todo comenzó, y Argentina, socio logístico, para entregarle dicho privilegio a ésta potencia futbolística en formación.
“Todos los chinos amantes del fútbol tienen un sueño: albergar un Mundial en China”, expresó Zhang Jian, vicepresidente de la Federación China, en una entrevista realizada esta semana desde la India. Y agregó: “Por supuesto que me gustaría que pudiese ser antes, pero la FIFA cuenta con sus reglas y respetamos sus decisiones”, respecto de las posibilidades casi nulas de que dicho honor les sea concedido para 2026.
El 2030 aparece, entonces, como escenario al que China apuntará todos sus cañones para cumplir con ese viejo sueño que, por otra parte, podría enemistar a la FIFA con los países que integran la CONMEBOL, donde ya dan por seguro que el Mundial del centenario se celebrará en la región.