Pocos futbolistas tocaron el cielo con las manos y, en cuestión de meses, rozaban el infierno como le ocurrió a Samuel Umtiti. El campeón del mundo con Francia en 2018, y excompañero de Lionel Messi en Barcelona, decidió sincerarse públicamente sobre uno de los episodios más difíciles de su vida: la depresión que sufrió inmediatamente después de vivir su mejor momento como futbolista.

En una entrevista documental de diario L’equipe, el zaguero, que se retiró en septiembre pasado a sus 31 años, reconoció que el éxito con Francia era diametralmente opuesto a su estado emocional. “Tuve grandes dificultades para salir de la cama y para ver a la gente“, confesó, explicando que atribuyó esos sentimientos a un bajón pasajero. “Para mí era solo un momento pasajero que iba a durar una semana… luego un mes, luego dos, luego tres, luego un año”, agregó.

Umtiti relató que la presión de mostrarse fuerte en el entorno deportivo le impidió buscar ayuda. “Me dije: ‘No, Sam, eres un hombre fuerte, te vas a levantar como siempre’. Y por eso no hablé”, explicó. Ahora, ya alejado de las canchas, reconoce el error que eso significó. “Al final, me hice daño permaneciendo en silencio. Habría podido salir antes de ahí si lo hubiese compartido“, afirmó el exfutbolista.

Samuel Umtiti en su paso por Lecce, en sus ùltimos años de carrera (Getty).

Con el diario del lunes, reconoce que el antídoto perfecto fue nada menos que interactuar con jóvenes que pasaron por situaciones similares. “Hablar con personas que estaban en la misma situación que yo me hizo un bien enorme”, aseguró.

La rodilla y el precio del Mundial

Aunque Umtiti evitó por años sacar a la luz su depresión, sí reconoció una consecuencia letal de ella: sus continuos problemas físicos, especialmente en su rodilla, la cual influyó en su deterioro psicológico y posterior retiro.

En 2018, el defensor arrastraba lesión crónica en su articulación. El Barcelona le había recomendado someterse a una cirugía que lo habría marginado del Mundial. Umtiti decidió no operarse y se infiltró. “Forcé la rodilla durante el Mundial. Pero ahora soy campeón del mundo. En la vida tienes que tomar decisiones y de esta elección no me arrepiento“, había declarado un año después. Sin embargo, tras ese torneo, su carrera se desmoronó por la exigencia física.

Samuel Umtiti, celebrando su consagración en Rusia 2018 (Getty Images).

Tras fichar por el Lecce y luego por el Lille, Umtiti puso fin a su carrera profesional a los 31 años, un retiro prematuro. No obstante, hoy goza de lo más importante: de una sonrisa. Y busca seguir expandiéndola como la receta para seguir adelante.

Datos clave

  • Samuel Umtiti confesó haber sufrido depresión tras ganar el Mundial de 2018.
  • El exjugador del Barcelona se retiró en septiembre a los 31 años.
  • Reveló en L’Équipe que permanecer en silencio agravó su situación emocional.