Los Juegos Olímpicos son la epítome del deporte, el lugar al que aspiran llegar los atletas de élite y donde sólo unos pocos finalmente consiguen llegar. Pero por cada atleta que llega, también lo hace su cuerpo técnico y médicos de primer nivel, atentos a cada detalle. Y es una fortuna que haya sido así, de lo contrario hubiera sido difícil salvar una vida, tal y como sucedió.

En la noche del jueves, el uzbeko Hasanboy Dusmatov se consagró campeón olímpico en la categoría hasta 51kg, al vencer al local Billal Bennama. Todo era celebración para el boxeador de 31 años y su entorno, hasta que uno de sus entrenadores, identificado como Tulkin Kilichev, comenzó a sentirse mal. “Habían regresado a los vestidores y estaban celebrando. Luego esos vítores cambiaron a gritos pidiendo un doctor“, relató Robbie Lillis, el fisio del equipo británico, uno de los héroes de esta historia.

Lillis explicó ante la prensa inglesa cómo él y el médico Harj Singh salvaron la vida del entrenador uzbeko en París 2024: “Harj fue el primero en responder, y yo llegué 30 segundos después con mi mochila de primeros auxilios. Cuando arribé, Harj ya estaba ejecutando el RCP, y yo me dediqué a abrir espacio para poder sacar el desfibrilador de la mochila”, contó el británico.

Hasanboy Dusmatov se había consagrado campeón olímpico minutos antes de que su entrenador sufriera un episodio cardíaco. Getty

Analicé su ritmo cardíaco y entendí que necesitábamos hacer un ‘shock’. Inicialmente no respondía, pero luego de unos 20 o 30 segundos de RCP de Harj, volvió en sí“, describió Lillis, completando el relato sobre el accionar para salvarle la vida al entrenador uzbeco.

Kilichev fue trasladado a un hospital inmediatamente

Tulkin Kilichev (der) celebrando el oro olímpico de Dusmatov, minutos antes de sufrir problemas de salud. IMAGO

Tras el rápido accionar de Lillis y Harj, quienes le salvaron la vida a Tulkin Kilichev, las autoridades de los Juegos Olímpicos se hicieron cargo del uzbeco y lo trasladaron a un centro médico para evaluación, donde aún se encuentra, aunque fuera de peligro.

“Estoy agradecido de haber podido ayudar par a salvarle la vida. Fue difícil dormir esta noche y poder manejar esta situación”, explicó el médico británico esta mañana, al relatar el suceso que tuvo lugar hace un par de días.

No es la primera situación de peligro en estos Juegos Olímpicos

París 2024 ha tenido más de un susto, y también ya sus tragedias. Las olimpíadas iniciaron con el fallecimiento del entrenador samoano Lionel Elika Fatupaito, el día de la ceremonia de inauguración. Luego vivimos el episodio de la nadadora eslovaca Tamara Potocka, quien fue asistida por los médicos tras un episodio de asma en su participación en la competencia de los 200 metros combinados.

Los médicos trasladaron a Tamara Potocka en camilla y con respirador tras su episodio de asma. IMAGO

Ya en deportes de mayor riesgo, fuimos testigos de una brutal colisión en los cuartos de final de la prueba Keirin femenina, provocada por la caída de la ciclista neerlandesa Steffie Van der Peet provocó el choque de Liying Yuan (China) y Nicki Degrendele (Bélgica).

Para completar, Noah Lyles, el velocista norteamericano campeón de los 100 metros libres, corrió la final de los 200 metros con COVID, y se tuvo que retirar en silla de ruedas luego de obtener el bronce olímpico. En todos los casos, el personal médico ha actuado con gran velocidad para impedir que en París 2024 haya que lamentar tragedias.