No solo en Inter Miami, sino en toda la MLS están revolucionados con Lionel Messi. Y él, como si nada. El capitán de la Selección Argentina continúa entrenándose junto a sus nuevos compañeros y deseando sumar minutos y poder ser útil mañana en el duelo de Leagues Cup ante Cruz Azul.
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Así como desde el club se buscó rodearlo con futbolistas que lo conocen muy bien, como Sergio Busquets que ya comparte prácticas con él y Jordi Alba que está al caer; igual que sucedió con la designación de Tata Martino como entrenador; hay también una amplia mayoría de jugadores de los que nada sabía desde que puso un pie en Miami.
Lejos de mostrarse ante ellos como la superestrella mundial que es, característica que trasciende ampliamente el ámbito futbolístico, Messi los dejó encantados desde el primer día por su simpleza, su humildad y la naturalidad con la que se integró al grupo.
Todo ello se desprende de las recientes declaraciones del defensor estadounidense DeAndre Yedlin al ser consultado sobre sus primeras impresiones de La Pulga: “Su inglés le basta para salir adelante. Habla con todos”, comenzó respondiendo a la pregunta de Franco Panizo.
De inmediato, contó una anécdota que lo sorprendió y que lo pinta como el mejor tipo del mundo: “¿Si es buen compañero? No lo conocía, estaba en el chat del grupo y (Leonardo) Campana necesitaba entradas para el partido del domingo. Él apareció y le dijo: ‘¿Cuántas necesitas?’“.