Lionel Messi fue el invitado esta semana en Clank!, el podcast de Juan Pablo Varsky y en una charla de una hora hizo un repaso por su carrera diferente al que jamás hizo y dejó varias definiciones sobre el fútbol actual, su análisis sobre momentos recordados de su carrera y la menara en que su mente trabaja en los momentos clave.

Cuándo se dio cuenta que era un crack

Desde pequeño Messi marcó la diferencia entre los niños de su edad y por eso el Barcelona puso los ojos en él para que complete su formación en La Masía. Es así que hasta hoy en día siguen apareciendo videos de su época como juvenil del cuadro rosarino que asombran a cualquiera.

Lo cuidoso es que si bien quienquiera que haya visto a Leo jugar en aquella época de infantiles hubiese advertido la calidad de ese niño, al propio Leo le costó entenderlo.

“Siempre era diferente, por lo que dicen, y la gente me iba a ver. Yo no me daba cuenta, fui entendiendo eso cuando fui creciendo, siendo mas grande. Pero el darme cuenta yo no sé en qué momento lo hice, pero tengo claro que nací así porque Dios me eligió a mí y fue un don el que Dios me dio. Después intenté aprovecharlo e hice lo posible para sacarle todo el jugó pero la verdad que, si bien hice muchas cosas, no hice nada para ser el jugador que ya de chiquito era“.

En este sentido recordó lo que fue su arribo a Cataluña en un club muy diferente a Newell’s que tenía una filosofía de tenencia y pases ya marcada en las categorías menores y que tal vez chocaba con su estilo de tomar el balón y apilar rivales hasta definir.

“Me habían elegido por el jugador que era y yo no iba a cambiar porque era lo que había hecho hasta ese entonces. Sí incluí un montón de cosas que me enseñaron y que hoy es más normal, pero en ese momento hasta un jugador de primera que venía de afuera le costaba la manera de entender la forma de jugar del Barcelona”. En este sentido, agregó: “Yo creo que hoy se ve muchísimo más y Guardiola lo llevó por todo el mundo”.

La táctica y el fútbol moderno de Pep Guardiola

Guardiola y Messi, durante su paso por Barcelona en 2011.

Yo no le daba mucha bola a la táctica y creo que con Guardiola aprendí muchísimo y empecé a entender mucho más del juego, los espacios, la tenencia de pelota, manejar los partidos a través de la pelota. Creo que el fútbol evolucionó muchísimo, también hoy cualquier equipo con línea de 4 o línea de 5 atrás bien trabajado te complica y antes encontrabas mucho mas espacio. Hoy por hoy es mas táctico y físico también“, analizó.

Cabe recordar que Messi debutó en la primera del Barcelona con el neerlandés Raikjaard, que apostaba por un fútbol más directo y que luego, con el arribo de Guardiola, la escuela de Johan Cruyff se profundizó aun más con el mediocampo como el anfitrión de cada juego.

Según Messi, aquellos años gloriosos del equipo multicampeón con Pep cambiaron el fútbol, pero hay algo de ese retazo que no le gusta: “Creo que también confundió un poco la época de Guardiola porque todo el mundo quiso copiar y jugar de esa manera y muchas veces a chicos de 6 o 7 años les empiezan a decir que tienen que jugar a uno o dos toques, que tienen que jugar rápido, que no pueden tener mucho la pelota y creo que a esa edad tiene que pasar lo que me pasó a mi. Cada uno es como es, sí que hay que enseñarles a que cuanto más chicos son tiene que entender el juego, moverse y encontrar espacios, pero tampoco quitarles la espontaneidad a cada uno. Creo que fue toda la vida que el jugador sudamericano siempre fue diferente y tuvo mas eso (la creatividad) que el europeo, pero es verdad que cada vez hay menos gambeta“.

En este sentido, recordó la mutación de su propio juego: “Me pasó al principio de mi carrera, cuando debuté, que por ahí era más individualista, jugaba más al 1 contra 1, hacía mi jugada en lugar que los dos toques. Después fui creciendo y fui agregándole cosas a mi juego también y me fui adaptando a mi posición de extremo pero nunca fue mi posición tampoco”. Además, aseguró que él siempre se sintió más un enganche que un punta, pese a la posición que ocupaba en sus primeros años.

Con respecto a Pep Guardiola, Messi recordó cómo fue que desde su llegada empezaron a cambiar muchos aspectos dentro del Barcelona, pese a que ya era un club de primer nivel. “Bajaba una línea y nos enseñaba qué era lo mejor para cada uno, pero después dependía de cada uno. Empezamos a comer en el club todos juntos y ahí ya te estaba cuidando y alimentando diferente, por lo menos en los desayunos y las comidas después de los entrenamientos”.

Messi y Guardiola ganaron 14 títulos en Barcelona

Pero, hubo un momento crucial que cambió a ese equipo en la temporada 2008/09, cuando aun no habían cosechado títulos y peleaba La Liga contra Real Madrid. En mayo de 2009 tocó visitar al Bernabéu en un duelo inolvidable. Para ese partido, Guardiola sacó a Eto del centro del ataque y lo mandó a una banda, mientras que a Messi lo utilizó como falso 9 para desorientar por completo al Real Madrid.

“Creo que él en la semana o un par de días antes en entrenamientos no lo llegó a probar pero algo mencionó de que capaz hacíamos algo diferente. Yo me entero el día antes del partido, nosotros viajamos el mismo día a Madrid y me entero a la tarde porque me manda a llamar”, rememoró Messi.

Incluso, Leo recordó textualmente lo que Guardiola le dijo mientras le mostraba unos videos tácticos: “Jugar con falso 9 porque no quiero que los centrales tengan la referencia y quiero que seamos uno más en la mitad de la cancha para tener la pelota porque para ganar en Madrid hay que tener la pelota, ser protagonistas y tenemos que ser nosotros, sino es muy difícil ganar ahí. Ya conozco bien ese estadio, fui muchas veces y es un estadio diferente a todos y si queremos ganar, tenemos que ser muy superiores a ellos y yo quiero tener la pelota. Así que quiero te vengas a mitad de cancha, te juntes con Xavi y Andrés (Iniesta) y si salen los centrales, tenemos a Samuel (Eto’o) y a Titi (henry) que son los que van a picar ahí“.

Y así fue que sucedió. Tal cual lo dijo Pep. El resultado fue 6 a 2, histórico y un antes y después para el fútbol.

“Éramos lo que habíamos dicho con él, uno mas siempre en la mitad de la cancha y ellos estaban un poco perdidos porque era algo nuevo para todo el mundo después de haber jugado durante un tiempo de la misma manera”, soltó Leo. “Encontramos el siempre ser uno más y manejar el juego a través de eso, de la tenencia de la pelota, de tenerla mucho y de hacer correr al rival y la verdad que llevó unos años hasta que un equipo le encontró la contra a eso“.

Cómo asimila los errores y las derrotas

Messi perdió cuatro finales con la Selección Argentina (Getty Images)

“No me gusta revivirlas o repasarlas, pero a la larga ayuda y te hace crecer”, sentenció Messi en la chara con Varsky, al tiempo que reconoció que su manera de analizar los errores cambió desde el nacimiento de Thiago.

“Yo creo que desde la llegada de mi primer hijo cambió mucho eso en mí. Yo perdía un partido y podía estar 2 o 3 días encerrado sin querer hablar con nadie, ir a entrenar mal, con la cabeza pensando en lo que había pasado y si hubiese pasado tal cosa o tal otra. Cuando llegó Thiago me cambió todo, llegar a casa y verlo a él me hacía olvidar un poco lo que había pasado”, sostuvo.

Entre tantas frustraciones una fue la de su debut en la Selección Argentina en agosto de 2005 cuando en un amistoso con Hungría se fue expulsado a los 47 segundos de haber ingresado al campo de juego.

“Toqué dos o tres pelotas como mucho, la verdad que no entendía nada cuando me habían echado porque me había pasado un montón de veces esa situación de querer sacarme a alguien de encima y el árbitro no tuvo nada de tacto, simplemente me echó que tampoco era para roja y fue un momento durísimo para mi por todo lo que significaba”, contó.

Al rememorar aquel vestuario, fue sincero sobre el dolor que sintió y aprovechó para agradecerle al Kily González: “Yo estaba muerto, llorando, no me podían contener. El vestuario me arropó muchísimo, el Kily estuvo muy cerca mío y me decía, ‘A mi me pasó lo mismo y yo jugué no sé cuantos partidos’, y así fue al final. Me quedó muy marcado eso. El Kily en ese momento fue muy cariñoso, se apegó a mí, me cuidó, él y todos, pero me acuerdo en especial la palabra de él”.

La era de la Scaloneta

Desde la llegada de Lionel Scaloni la Selección Argentina ganó tres títulos (Getty Images)

Después de tantas frustraciones, finales perdidas y falta de títulos, Leo Messi aceptó el desafío de continuar en la Selección Argentina con la llegada de Lionel Scaloni, justo después de la eliminación del Mundial de Rusia 2018.

Para eso el plan fue que La Pulga se tomara un tiempo fuera de las convocatorias y en paralelo se creara un nuevo grupo con jóvenes talentos que antes no tenían espacio en la Albiceleste. Así aparecieron Lautaro Martínez, Rodrigo de Paul, Leandro Paredes y otros tantos nombres que empezaron a conformar un nuevo plantel al que meses después se sumó Leo.

Rodrigo (De Paul) me ayudó mucho por su manera de ser, cuando lo conocí me recordó mucho al Pocho (Lavezzi), porque era muy parecido, muy alegre, muy bueno para el grupo, hacía que todos sacáramos lo mejor de nosotros. El primer día se me acercó y hablamos e hizo que yo entrara al grupo mucho más rápido de lo que hubiese imaginado”, comentó Messi que también aportó su granito de arena: “Mi postura era de sacarme la vergüenza e intentar ser yo el que daba el paso porque era una situación diferente y nueva para todos”.

A la hora de analizar las virtudes de la Scaloneta, no dudó: Nosotros encontramos unos medios maravillosos, donde la mayoría en algún momento fue enganche y se nota mucho eso. El enganche es un jugador diferente que pierde pocas pelotas y nosotros en el medio empezamos a perder pocas pelotas“. Y no escatimó en elogios al referirse a Enzo Fernández, Alexis MacAllister y Rodrigo De Paul: “Lo que eran Xavi, Iniesta y Busquets en su momento hoy lo encontramos en la Selección también“.

La derrota con Chile en la final de Copa América 2016 y su renuncia a la Selección

Después de jugar la final del Mundial 2014 y la de la Copa América 2015, la Selección Argentina, que por entonces conducía Gerardo Martino, alcanzó el partido definitorio de la Centenario 2016. Según Messi, aquel equipo fue los mejores que integró a nivel nacional y esa derrota por penales ante Chile fue la que más le dolió.

“Sin dudas porque ya era la tercera seguida, habíamos hecho una Copa América muy buena a nivel de juego llegando a la final siendo muy superiores al resto. Porque en la final a Chile, si bien no tuvimos muchísimas ocasiones claras, a nivel de juego también fuimos superiores y volvimos a perder por penales”, afirmó.

Después de esa caída, en la que falló el primer penal, Messi renunció a la Selección: “En ese momento me quería matar porque era el primer penal, el que nos ponía en ventaja, le quise pegar fuerte cuando sabía que no hacía falta, tenía claro que Bravo iba a ir hacia ese lado y ahí fue una cruz hacia mi mismo cuando erré”.

Foto pendiente con Michael Jordan

Michael Jordan y Lionel Messi.

Pocas personas han sido tan fotografiadas en la historia como Lionel Messi y Varsky aprovechó para preguntarle si él tiene justamente una foto pendiente con alguien. A la hora de elegir, optó por Michael Jordan.

“Me parece a nivel deportivo lo más groso que hay y después de haber visto su serie me acercó mucho más a lo que fue él. Es una lástima que no haya podido vivir esa época en vivo porque me hubiese encantado. No sé mucho de básquet, tampoco ni soy muy seguidor pero creo que él fue algo diferente en todos los deportes y tengo una admiración muy grande hacia él. Me pidieron tantas fotos, que por qué no tener una con él, sería algo muy lindo“.

La entrevista completa