No debería haber nada extraño en el hecho de asistir al partido que homenajeó a uno de los más grandes jugadores que el fútbol argentino pudo disfrutar en los últimos 30 años; máxime si se piensa que allí asistieron también otros cracks que trascienden cualquier camiseta.

Sin embargo, a un directivo de Atlético Tucumán que fue captado en La Bombonera le costó su cargo haber ido a ver la despedida de Juan Román Riquelme. Se trata de Miguel Abbondándolo, vocal titular del club que este domingo sufrió una durísima derrota 4-1 en su visita a Sarmiento.

Lo que generó el fastidio de hinchas y otros integrantes de la comisión directiva del Decano fue que a las entradas para el partido homenaje solo podían acceder los socios de Boca, simpatía que se confirma si se tiene en cuenta que además fue vestido de azul y amarillo.

“Tengo dos hijas chicas y la de 7 años y me había pedido verlo a Messi. Quizás está era la única oportunidad que tenía para poder llevarla, porque después para las Eliminatorias es más difícil. Pude conseguir las ubicaciones y fuimos”, había explicado el dirigente.

No fue suficiente, porque la presión y el enojo fue tanta que lo llevaron a presentar la renuncia a su cargo, algo que fue informado de manera oficial desde las propias redes sociales del club tucumano. “Yo no soy hincha de Boca”, aseguró Abbondándolo antes de despedirse.