Una vez más, Sebastián Vignolo se mostró rendido a los pies del River de Marcelo Gallardo, después de que el Millonario le gane por 3-0 a Lanús de forma contundente, sumando su tercera victoria al hilo dejando en el camino a Unión también por el torneo local y Argentinos Juniors en la vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores.
“Parece una frase hecha, pero te dicen algunos futbolistas, sobre todo los que se fueron de River, o los que están pero ya son grandes, te dicen que Gallardo no se casa con nadie, pone al que está mejor. Entonces vos decís, no tiene que ser normal eso, poner al que está mejor. Bueno, para eso, hay que tomar decisiones fuertes, porque algunos tienen más nombre que otros, y ese nombre te lleva a decir no, me voy a meter en un lio, lo aguanto un poco más”, comenzó explicando en su clásico editorial en ESPN F90.
Luego, siguió: “No es que Gallardo sea un tipo sin sentimientos, los tiene, pero cuando va a trabajar el corazón lo deja en la mesita de luz, cuando va a dirigir a River, toma decisiones más allá de los sentimientos, la gratitud, no se fija el apellido, se fija el funcionamiento, y de golpe cualquiera que tiene nombre, se ve afuera del equipo, y el que estaba afuera, se ve adentro, esa es la competencia que tiene River mientras juega las otras competencias”.
Además, agregó: “Nos cuentan aquellos que podrían ver entrenamientos, queeran un partido por los puntos, se sacaban chispas, hasta aveces tenían que pararlos, se entrenaba con canilleras, de tipos que no parecían del mismo equipo, eran leales, pero se jugaba fuerte, porque sabían que podían ganarse o perder un lugar. En River no hay lugar para la zona de confort, lo conseguís una vez que te vas para ganar dinero en otro lado, pero estando ahí, la zona de confort es ganar, no existe otra, no hay”.
Para ir cerrando, no dudó: “Me imagino que en este momento, Pinola y Maidana, que son póster de River, se deben estar rompiendo la cabeza para ver cómo hacer para entrar en el equipo titular. Lo mismo Milton Casco, Palavecino. Y Zuculini que estaba con el bolso yéndose, hoy dice que no quiere salir más. Ahí está el liderazgo de Gallardo, es un tipo frío que toma decisiones para que a River le vaya bien. Se puede equivocar, pero asume el error y lo cambia”.
Y culminó: “River tiene otra velocidad, no cómo corren los futbolistas, sino la pelota, la intensidad para todo. Gallardo no te deja descansar un segundo, por eso el que no aguanta más se va, porque debe ser bastante complejo soportar las 24 horas de un Gallardo encima y ganador. Ahora, si no se cansa él, cómo se va a cansar un futbolista, te obliga, exige”.
