"Para mí el fútbol es todo. Es lo que más me gusta en el mundo. Es todo". Emma sonríe y ya en este 2021 nadie se sorprende de sus palabras: una nena de 12 años que ama jugar a la pelota ya es algo mucho más normal que en otros tiempos.

Sin embargo, y pese a los pasos firmes que fue dando el fútbol femenino en Argentina con la profesionalización y la televisación de todos los partidos de la Primera División y la obligación de que esos equipos tengan un equipo de Reserva, lo cierto es que ese crecimiento no siempre viene acompañado de las mismas posibilidades para todas. 

Emma Rodríguez tiene 12 años y vive en Guaminí, en la provincia de Buenos Aires. Desde los seis años que juega al fútbol en el Club Deportivo Empleados de Comercio y se entrena con sus compañeros varones. Sin embargo, la Liga Regional de Coronel Suárez se niega a habilitarla a competir porque no permite la participación de mujeres en el torneo local. 

Élla es la única nena de su categoría, se entrena con sus compañeros pero la explicación de la Liga es que en AFA no se contemplan los equipos mixtos en las divisiones competitivas. Por eso sus padres armaron la campaña #DejenjugaraEmma, presentaron una denuncia en el INADI (Instituto Nacional contra la Discriminación) para buscar una solución. En los próximos días habrá una reunión virtual con AFA, la Liga, el INADI y sus padres para buscar una solución.

"Es la realidad que tenemos en los pueblos chicos, no hay liga femenina", contó su papá Eduardo. Por eso la intención es que se pueda hacer una excepción en aquellas Ligas que no cuentan con la cantidad de nenas suficientes para poder armar un equipo completo. De esa manera, contemplando la posibilidad de formar planteles mixtos hasta cierta edad servirá para fomentar la participación de niñas en el fútbol regional y además no le cortará la carrera a aquellas que con cierta edad ya no se lo permiten.

Rocío Bueno, delantera de Racing, se conmovió con la historia de Emma ya que ella vivió una situación similar a la misma edad y también en la localidad de Coronel Suárez. Y por eso la invitó a conocer el predio Tita, donde se entrena con la Primera del equipo de Avellaneda y a disfrutar de una jornada con otras "nenas" que ya comenzaron a vivir el sueño que ella busca concretar. "Quiero ser jugadora profesional", dijo. El camino ya comenzó.