Difícilmente hoy exista una persona más feliz que Thiago Almada. El ex-Vélez, se había ganado un lugarcito en la consideración de Lionel Scaloni en la doble fecha de septiembre, pasó de estar casi de vacaciones a ser llamado para jugar su primer Mundial. De la noche a la mañana, el volante se subió a un avión para irse a Qatar junto a Ángel Correa.
Tras recibir el llamado del entrenador, el jugador del Atlanta United se armó el bolso y se marchó rumbo a Doha durante la madrugada de este viernes. Como si fuera poco, una multitud conformada por amigos e hinchas lo despidió en el aeropuerto. Momento soñado. “Es el día más feliz de mi vida”, aseguró minutos antes de despegar.
En el medio de la euforia y muy consciente de todo el contexto, Thiago bajó un cambio y mandó un mensaje para Joaquín: “Dejame saludar al Tucu, que está pasando un momento duro. No se lo deseo a nadie. Espero que se recupere pronto”, declaró.
“Estoy muy emocionado. Cómo se vive el fútbol en Argentina es muy lindo. Muy contento por todo lo que luchamos y lo que vivimos en el día a día”, agregó el futbolista de Fuerte Apache. ¡El sueño del pibe!