Pasaron más de dos semanas desde que se disputó el último partido del fútbol argentino antes de que se decida, en conjunto entre la AFA y los jugadores, que había que parar la pelota por tiempo indefinidio. A los pocos días, todo el país entró en cuarentena obligatoria, buscando evitar que el coronavirus se expanda en grandes escalas como si sucedió en varios lugares de Asia y Europa, que no la están pasando para nada bien. Desde ese entonces, los futbolistas buscan la manera de mantener su estado físico para que la vuelta no se les sea tan dolorosa, todo desde su hogar, usando un poco de la creatividad y otro poco de la ayuda de profesionales.

 

Ya contó Nicolás De La Cruz que el plantel de River entrena con un GPS que acumula datos que luego son enviados al cuerpo técnico del Millonario, y es también el caso de Boca. Mauro Zárate contó en diálogo con Radio La Red que tienen un seguimiento muy específico por parte de los profesionales que los acompañan, intentando que todos estén en la misma página. "El profe nos manda para hacer un trabajito en la semana. A la tarde hacemos una videollamada en dos grupos y ahí trabajamos con él", expresó el delantero sobre cómo lleva el día día entrenando desde su hogar, habiéndose equipado de tal manera como para que no le falte nada a la hora de entrar en movimiento. 

De igual manera, no solo se explayó sobre ese tema, analizando lo que fue el cambio de entrenador a comienzos de este año: "Cambiamos un poco en la tenencia de pelota y a partir de ahí atacar más"Luego de que Ameal ganó en diciembre del 2019 las elecciones para ser el nuevo presidente del Xeneize, se tomó la decisión de dejar de trabajar con Gustavo Alfaro, y luego de varias semanas de incertidumbre, se terminó revelando que Miguel Ángel Russo iba a tomar las riendas de un equipo que venía golpeado por haber quedado eliminado ante su eterno rival una vez más en un cruce internacional, por las semifinales de la Copa Libertadores. 

Volviendo al ámbito más personal, Mauro no dudó en que "fue un acierto llegar a Boca", y dejó una frase que siempre abre la polémica, recordando cómo fue su salida de Vélez para fichar en el club de La Ribera: "Estoy contento de haber tomado esa decisión"Más allá de su conformidad con el lugar en el que está, desde que llegó nunca pudo asentarse como titular con ninguno de los DT que pasaron, sea por lesiones, porque no lo elegían o porque su nivel de juego no era el que supo demostrar no solo en Liniers, sino también en su paso por Europa.

 

 

Para cerrar, dejó las declaraciones más fuertes de todas, sin dudar un segundo sobre lo que quiere para su futuro: "Me quiero quedar en Boca. Si me ofrecen, firmo para quedarme y retirarme acá", tiró sin dudar. Veremos si desde la dirigencia tienen en cuenta lo dicho por Zárate, que mientras pasa sus días junto a su mujer e hijos, jugando mucho a la PlayStation y con mucha presencia en las redes sociales, algo que podemos ver sobre todo en la cuenta de Natalie Weber. Esperemos que pronto vuelva a rodar el balón, y que la situación a nivel mundial mejore, para que la pandemia deje de atentar contras los eventos que más nos gustan.