En el Renato Dall'Ara, Bologna recibió al Milan, que necesitaba ganar para terminar el fin de semana, como el anterior, siendo el único líder de la Serie A.

Antes de la media hora de juego, Rodrigo Leao cayó en el área por un agarrón y el árbitro cobró penal para la visita. Desde los doce pasos, Zlatan Ibrahimovic se hizo cargo del remate, pero el arquero se lo atajó y en el rebote Ante Rebic fue quien marcó el 1-0.

Ya en la segunda parte, un nuevo penal, pero ésta vez por una mano grande como el estadio, Milan marcó su segundo gol. No pateó Zlatan, sino que fue Franck Kessié, quien estiró la ventaja.

Sobre el final del encuentro, el Bologna no se lo hizo fácil al Milan y descontó de los pies de Andrea Poli tras una gran jugada de Rodrigo Palacio.

Grandes a las atajadas de Gianluigi Donnarumma, Milan puso sostener la ventaja y se quedó con los tres puntos.

Como el fin de semana, el Rossoneri dormirá como líder de la Serie A y en el comienzo de la segunda mitad de la temporada.