El pasado 19 de noviembre, Demetrius Andrade le propinó un espectacular nocaut en el segundo asalto a Jason Quingley para realizar la quinta defensa exitosa de su título mundial de peso mediano de la OMB y reclamar la posibilidad de ser protagonista de una gran pelea como su status de campeón merece.

También Eddie Hearn, quien promueve su carrera desde MatchRoom Boxing, dijo no entender por qué los otros grandes nombres de las 160 libras miraban hacia otro lado, ni tampoco por qué su peleador se ha ganado la mala fama de no ser un campeón mundial que corte boletos ni venda grandes cifras de Pay Per View.

Por todo ello es que el reconocido promotor británico anunció antes de terminar el año que si no hay grandes peleas para Demetrius Andrade en la división de peso mediano, no dudará en dejar vacante su cinturón para subir a buscarlas en 2022 a las 168 libras, donde Canelo Álvarez es campeón mundial indiscutible.

“Demetrius Andrade tuvo un buen año. No son las peleas insignia que queremos, pero son agradables y activas. Gran victoria contra Quigley la última vez.Tiene la obligación contra Janibek, pero necesitamos una pelea más grande que esa, con toda honestidad. Entonces, si no podemos encontrarlo en el peso mediano, creo que subirá al peso súper mediano y será obligatorio allí”, señaló Hearn en diálogo con BoxingScene.

Si Andrade finalmente confirmara la decisión de subir a las 168 libras siendo campeón de peso mediano de la OMB, los estatutos del organismo determinan que sería elevado como retador obligatorio a ese cinturón que, como los de los otros tres órganos rectores, ostenta Canelo Álvarez.