El sábado 5 de marzo de 2022 se ha convertido en una fecha tristemente célebre a consecuencia de los lamentables hechos de violencia y vandalismo en la cancha del estadio La Corregidora durante el partido entre los Gallos Blancos del Querétaro y los Zorros del Atlas. Este suceso se ha convertido en un escándalo a nivel mundial y podría tener consecuencias indeseables para el futbol mexicano.
De entrada las primeras consecuencias deberían caer sobre la franquicia del club Querétaro. La magnitud de los acontecimientos amerita que haya algo más que una advertencia de veto para el estadio La Corregidora, de acuerdo al reglamento de sanciones de la Federación Mexicana de Futbol.
“La Comisión Disciplinaria, a su entera discreción e independientemente del número de aficionados que invadan la cancha, deberá analizar la conducta desplegada por éstos, es decir, si agredieron o causaron lesiones (a Jugadores, integrantes del Cuerpo Técnico y Oficiales de Partido, entre otros) si causaron disturbios, etc., en esos casos el Club responsable será acreedor a una multa de 4,000 a 7,000 UMA ́s, y por lo menos un partido de veto al Estadio“, reza el artículo 56 del reglamento.
En redes sociales los aficionados claman por una desafiliación del Querétaro y es que un segmento de su afición está identificado como uno de los más problemáticos y violentos en el futbol mexicano.
Mikel Arriola dejó entrever que la desafiliación del Querétaro no es una posibilidad lejana porque “los clubes son los responsables de la relación con las barrasy si van más allá, con eso antecedentes también agravan la responsabilidad de los involucrados, no solo se revisa el estatus del estadio, también el club con sus grupos de animación”.
Por lo pronto, el reglamento establece que“un Afiliado a la FMF perderá su afiliación si: b. Cometa una falta gravey/o viole o incumpla en más de una ocasión cualquier disposición de este Reglamento, el Estatuto Social, las Directivas o las decisiones de FIFA, CONCACAF y/o la propia FMF“.
¿Consecuencias para la sede del Mundial de 2026?
En los últimos meses, la FIFA ha mandado a una comisión revisora de estadios para la Copa del Mundo de 2026 a revisar las ciudades postuladas por los tres países que serán anfitriones: Canadá, Estados Unidos y México, que tiene propuestas tres sedes: Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey.
Los sucesos acontecidos en el estadio La Corregidora desataron en redes sociales la reflexión de que con un clima hostil con potenciales brotes de violencia, México no puede ser sede del Mundial.
“Que cancelen la liga, que desciendan los equipos o cierren sus franquicias. Que clausuren el estadio, que México no vaya al mundial, y que nos quiten la sede del 2026. Nada de esto debe pasar en el fútbol. Futbol sin violencia”, fue uno de los comentarios vertidos en redes sociales.
En otro comentario le fue solicitado a la FIFA que sancione al futbol mexicano.“México no puede ni debe ser una de las tres sedes del Mundial de Fútbol del 2026. La FIFA tiene que sancionar la violencia insana registrada hoy. El futbol no es eso que hemos visto”.